Este fútbol da auténtico asco

AHORA resulta que el Tenerife presuntamente trincó para facilitar el ascenso del Málaga a Primera División y Jesuli no ha tenido inconveniente alguno en reconocer que se corrompió aceptando el teórico soborno cuando militaba en el conjunto isleño, por muchas retractaciones posteriores que hiciera. Fernando Sanz llama tarado a Badiola, su homólogo en la Real Sociedad, pero toda esta historia deja un tufillo muy pestilente, más aún cuando tan sólo días después salta a la palestra que el Athletic, para eludir el descalabro de descender a Segunda, supuestamente pactó con el Levante un triunfo. Resulta curioso que fuera con un equipo que por entonces atravesaba serios problemas de pago a sus jugadores. Esto viene pasando año sí y otro también ante la ceguera de las autoridades deportivas, que prefieren mirar hacia otro lado para ventilar sus vergüenzas. Por si al sarao le faltara algún ingrediente, la prensa (¿quién si no?) destapa que Juande Ramos estuvo comiendo en septiembre con Raúl y Guti en presencia del representante de los tres, Ginés Carvajal. El manchego se hacía cargo del banquillo merengue hace unos días, no sin antes haber presenciado in situ el partido contra el Sevilla. Y algunos siguen empeñándose en hacer ver que los jugadores no saben hacer la cama...

La prolongada agonía de Schuster, con la grada del Bernabéu solicitando su marcha, puede sonarle bien a muchos aficionados rojiblancos. La diferencia es que el alemán pedía a gritos que ejecutaran su despido, mientras que Arconada aguanta con estoicismo en el cargo. Puede que ahí esté la clave porque dicen que de las malas rachas se sale más reforzado. De momento, Alfonso García ha demostrado paciencia, pero una derrota hoy se haría insostenible porque entonces, como en Chamartín, los pitos de la grada virarían del banquillo al palco. Hay quienes no ven margen de reacción aunque se gane, pero en el fútbol ya ven que todo es posible, incluso lo imposible.