Emoción y lágrimas en el encuentro entre Arturo Hidalgo y Ángel Valero

Mojácar fue testigo del encuentro de Arturo Hidalgo y un grupo de compañeros de los GEO, unidad de élite de la Policía Nacional y Ángel Valero, un vecino de Mojácar que hace 43 años trabajaba en el Banco Central de Barcelona. Fue el 23 de mayo de 1981 cuando se produjo el atracó a dicho Banco en la Ciudad Condal.

Las miradas se cruzaron y el cariño y la emotividad era palpable, Arturo y sus compañeros participaron en la operación de liberar a los rehenes en aquel atraco que duró 37 horas. Ángel Valero era un funcionario del Banco Central, que fue asaltado por un grupo de ladrones con la intención de llevarse 5.000 millones de pesetas. Valero estaba en una mesa del Banco a pocos metros del despacho del presidente de la entidad, Alfonso Escámez.

Por eso 43 años después, Ángel Valero se emocionó, soltó alguna lágrima y le dio las gracias a ese equipo de policías que lo liberaron. Valero comentó a los policías que temió por su vida, y que fueron horas interminables. Realmente aquello parecía una película, pero la realidad mantuvo en vilo a todo el país durante muchas horas.

Arturo Hidalgo recuerda que “estábamos en la base de Guadalajara, y nos avisaron del atraco al Banco Central de Barcelona. Nos dirigimos toda la unidad al aeropuerto de Barajas. Desalojaron un avión y nos trasladamos a Barcelona y de allí a la plaza de Cataluña. Fuimos conscientes que los atracadores querían sacar 5.000 millones de pesetas a través del subsuelo”.

Aunque el próximo jueves se cumplen 43 años de aquel suceso, Arturo guarda un volumen como dossier de prensa de lo que se publicó en todos los medios de comunicación. Sabe que fueron unas 11 personas las que entraron en el Banco y redujeron a los vigilantes de seguridad, y sabían todos los sitios donde tenían que buscar. “Se supone que la información que tenían era privilegiada, lo cual indica que podía ser de alguien del banco” subraya.

Fueron 37 horas que parecían no tener final. “Transcurridas más de 30 horas, seguíamos oyendo el repicar con herramientas en el subsuelo. Solo había dos vías de salida para los atracadores o mezclándose con los rehenes y salir por la puerta principal o saltando a través del Banco Garriga Nogués, junto al Banco Central e incluso avisaron que había explosivos puestos por todo el Banco”, narra Arturo Hidalgo. Los GEO tomaron el Banco Central y se produce un intercambio de disparos con los atracadores. Como resultado uno de los atracadores es abatido y detienen a otro. Entonces, el grupo de élite de la Policía, inicia desde el terrao la toma del Banco y de esa manera detener a todos los atracadores. “Al final, todo salió bien, que era nuestro objetivo, puesto que hubo un herido en una pierna de los rehenes, y tanto los funcionarios como el resto de personal fueron liberados, en una gran operación”.

Ángel Valero se sintió emocionado al estar de nuevo frente a sus salvadores en aquel triste suceso ocurrido en 1981 en España. Valero relató su experiencia en esos momentos tan difíciles: “perdí seis kilos”, resaltando la magnífica actuación de esta unidad de élite y que “gracias a ellos, salió todo bien y nos salvaron la vida”.

Entre el intercambio de las muchas anécdotas de aquel día, el portavoz de los GEO, Arturo Hidalgo le mostró a Valero un álbum con los recortes de prensa que se publicaron en referencia al atraco y que mantuvo en vilo a todo el país, llenado las portadas de todos los medios de comunicación. Hidalgo confiesa que “encontrarnos con Ángel Valero fue algo que nos llenó de alegría y satisfacción. Nuestro deber como miembros de los GEO siempre fue actuar sin provocar daño a los rehenes. Y así se hizo”.