Siete positivos en alcohol y tres en drogas se sancionan cada día en las carreteras de Almería

Un pequeño camión de transporte se salía de la vía y colisionaba contra uno de los comercios en uno de los bajos de carretera de Ronda este miércoles a mediodía. El vehículo perdía el control e invadía la acera llevándose por delante casi cuarenta metros de valla de protección. A pesar de que es una arteria bastante transitada, no se produjo ningún atropello directo, si bien una joven resultó herida, con contusiones en la rodilla, al tropezar en su intento de ponerse a salvo. El joven conductor de 26 años, vecino de Roquetas, era denunciado por la Policía Local por un positivo en las pruebas de detección de drogas. Y no es un episodio aislado y mucho menos durante este mes de diciembre. Se multiplican los conductores sancionados por la ingesta de alcohol y sustancias tóxicas y psicotrópicas.

En la madrugada del viernes 5 de diciembre hasta tres conductores eran investigados por delitos contra la seguridad vial, entre ellos un jugador de la UD Almería, por positivos en alcoholemia y graves incidentes contra la seguridad vial. Uno causó destrozos en varios vehículos y contra el acceso al garaje de un residencial de la Vega, otro se estrellaba en la calle Granada intentando sin éxito darse a la fuga tras el siniestro y el tercero embestía con su vehículo el quiosco de información y ventas de Surbús a la altura de La Salle. Alcohol, drogas y ponerse al mando de un vehículo son hoy la combinación más letal para la seguridad vial en las carreteras de la provincia, factores de riesgo que alteran sustancialmente las capacidades de conducción, con peores reflejos, mayor tiempo de reacción, visión borrosa, alucinaciones, decisiones erróneas y somnolencia.

Según los datos del último año del Instituto Nacional de Toxicología y Ciencias Forenses, casi la mitad -un 48,2%- de los conductores fallecidos en accidentes de tráfico que fueron sometidos a autopsia habían consumido alcohol, drogas o psicofármacos, aisladamente o en combinación. En los últimos once años, según el estudio comparativo del Observatorio Nacional de Seguridad Vial, se ha producido un incremento del 7,2% de positivos en los análisis toxicológicos de las víctimas mortales, lo que pone de manifiesto la preocupante dinámica al alza de esta práctica irresponsable y la necesidad de adoptar una política de tolerancia cero contra una de las principales causas de accidentabilidad y criminalidad vial.

Campaña especial de Navidad

De ahí que los controles preventivos aleatorios, campañas específicas y pruebas en accidentes e infracciones se hayan incrementado en los últimos años para castigar, y a veces sentar en el banquillo de los acusados por delitos contra la seguridad vial, a los que ponen en peligro su vida y la de los demás. La Dirección General de Tráfico ha desarrollado entre el 15 y 21 de diciembre, en los días previos a las fiestas navideñas en los que se acumulan las celebraciones de familiares y amigos, una campaña especial con más de 35.000 pruebas de alcohol y drogas cada día. En la anterior, en diciembre del pasado año, en Almería se realizaron más de 6.500 test que arrojaron 52 positivos en alcohol y 53 en drogas -el doble que en la campaña de 2023-, con siete conductores denunciados por un delito contra la seguridad vial. Esta semana ha vuelto la vigilancia intensiva en las vías interurbanas y cascos urbanos de la provincia a cualquier hora del día con un importante despliegue de agentes de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil en colaboración con las policías locales de los grandes municipios.

A pesar de que la concienciación de la sociedad española sobre los riesgos que entraña la ingesta de alcohol y/o drogas al volante ha avanzado mucho en las últimas décadas, la cifra de conductores sancionados no baja, ni tampoco su impacto perjudicial en la estadística de siniestros. En 2022 fueron multados por positivos 3.521 conductores, 3.739 en 2023, 3.953 en 2024 y 3.437 en los once primeros meses de lo que va de año, más de 40.000 desde la entrada en vigor del carné por puntos en verano de 2006. Según los datos de la Jefatura de Tráfico de Almería, en la red viaria provincial se sancionaron el pasado ejercicio 2.578 positivos en alcoholemia y 2.352 entre enero y noviembre de 2025, lo que se traduce en una media de 7 al día y en torno a 220 cada mes. En cuanto a los multados por haber consumido sustancias psicotrópicas, en 2024 fueron 1.375 y en los once primeros meses del ejercicio en curso 1.085, por lo que la media mensual se sitúa en más de 100 positivos y 3,2 por jornada. La sanciones de alcohol y drogas arrojan una media diaria de diez conductores sancionados, si bien algunos suelen reincidir y presentan policonsumos.

En las carreteras de la provincia se realizan cada vez más pruebas de consumo de alcohol y también salivares a aquellos conductores que presentan signos evidentes de estar bajo los efectos de sustancias como el cannabis, la cocaína o las anfetaminas. En 2022 se hicieron 1.525 pruebas de drogas, 2.154 en 2023 y 2.760 en el último año en el que los positivos alcanzan el 50% de los que se han sometido al test. En los once primeros meses de 2025 han sido 3.198 con casi un 35% de pruebas que acarrearon sanción. Las de alcoholemia también han sufrido un notable crecimiento y han pasado de 129.827 en 2022 a 147.204 en 2023, 180.795 en el pasado ejercicio y 150.968 entre enero y noviembre de este año, casi siempre con una prevalencia menor al 2% de los que soplan en el alcoholímetro.

Bajada de la tasa de alcohol

Actualmente el Congreso de los Diputados está tramitando la Proposición de Ley sobre la reducción de la tasa máxima de alcohol al volante para todos los conductores a 0,10 mg/l de aire esperado, alineándose con las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud, la Unión Europea y el Consejo Europeo de Seguridad en el Transporte (ETSC). Esta tasa ya está implementada desde hace años en países como Suecia y Noruega, dos de los países europeos que tienen los mejores datos del mundo en seguridad vial y siniestralidad, tal y como lo demuestran las cifras. La bajada de la tasa de alcohol en aire espirado de 0,25 a 0,10 mg/l realizada en Noruega y Suecia en 1990 y acompañada de otras medidas complementarias, supuso una reducción del 12% en los siniestros con víctimas, una disminución de un 8% de los siniestros mortales y además se rebajaron un 16% los casos de personas que conducían bajo los efectos del alcohol.

Desde la DGT se insiste una vez más en recordar que la única tasa segura es 0,0% ya que, aún con tasas de alcoholemia dentro de los márgenes legales permitidos, nuestro riesgo de provocar un accidente puede verse incrementado. Además, 0,0% es la tasa, tanto en sangre como en aire espirado, que deben respetar los conductores menores de edad que conduzcan cualquier vehículo tras la entrada en vigor de la reforma de la Ley de Tráfico y Seguridad Vial.

Por su parte, el capítulo IV del Título XVII del Código Penal tipifica los delitos contra la seguridad del tráfico y establece las siguientes penas por conducir con exceso de alcohol o bajo la influencia de drogas tóxicas, estupefacientes o sustancias psicotrópicas.

Además, desde la entrada en vigor del permiso por puntos hace casi 20 años, alrededor del 12% de los infractores sancionados y del 14% de los puntos detraídos han estado relacionados con el hecho de conducir con una tasa de alcohol superior a la establecida y dos de cada tres delitos cometidos contra la seguridad vial están relacionados con el alcohol.