Puntual a la cita, como avisaban las previsiones meteorológica desde el inicio de la semana, la Sierra de Los Filabres comenzó a cubrirse de nieve a las 18:00 horas de la tarde del Día de Reyes. En poco más de una hora la carretera de Calar Alto ya se había cerrado al tráfico. Los vecinos del municipio de Bacares celebraban sobre la media noche la copiosa nevada que iba aumentando conforme avanzaba la madrugada. Sin parar en toda la noche.

El temporal ha sido el colofón a las fiestas navideñas y a unos días de intenso frío en los que se han llegado a registrar hasta seis grados bajo cero en el pueblo y doce negativos en punto como Calar Alto o la Tetica de Nímas. Hoy, ya con las calles blancas y un espesor de 20 centímetros acumulados, las temperaturas son más llevaderas. Tres grados centígrados registraban los termómetros cuando el reloj marcaba las 11:00 horas.

Es la primera nevada del año nuevo 2021, un buen augurio para quienes más saben de los beneficios que reporta un temporal así tanto para el campo como para las reservas de agua, para la fauna de la zona y cómo no, también para el turismo. Los bacareños llevaban esperando la nieve desde hace casi un año exacto. Fue el pasado 20 de enero de 2020 cuando cayó la última nevada, una de las más intensas de los últimos años.

El temporal de nieve ha impedido la vuelta al cole de los más pequeños, como también ha ocurrido en otros municipios de la provincia de Almería. Los docentes no han podido acudir a su puesto de trabajo al estar las carreteras de acceso completamente cortadas a primera hora de la mañana. Aunque las máquinas quitanieves tanto de la Diputación Provincial de Almería como de la Junta de Andalucía se activaron antes de las primeras luces del día, no ha sido hasta bien entrado el mediodía cuando se ha decretado que ya se podía circular.

Las humeantes chimeneas de la práctica totalidad de los hogares de Bacares anunciaban un día de lumbre y migas, pero también de diversión en las calles. A pesar de la pandemia, los vecinos no han dudado en salir para disfrutar de las actividades que ofrece la nieve. Eso sí, con todas las medidas de seguridad para seguir haciendo frente al coronavirus.