Los autos locos conducen la fiesta

Las Fiestas del Emigrante de Lubrín vivieron una última jornada muy especial gracias a que todos los vecinos del municipio se volcaron con la amplia programación de actividades que ha dispuesto este año el Ayuntamiento para todos ellos, y que también han disfrutado con gran intensidad la multitud de visitantes que desde el pasado lunes 31 llegaron para ser partícipes de ellas.

Desde que el miércoles el espectáculo del ilusionista Alex Navarro dejara a todos boquiabiertos en la Plaza de la Constitución, que ha sido centro neurálgico de estas fiestas, el sábado por la tarde fue el la carrera de autos locos el evento más destacado. El municipio al completo participó de este evento en el que los corredores mostraron sus dotes artísticas para diseñar unos vehículos que no dejaban indiferente a nadie. Con forma de tanques, de animales o el mismísimo coche de los picapiedra recrearon una carrera en la que también llamó la atención la habilidad con la que estos especiales pilotos mostraban sus dotes para sortear curvas y bajadas pronunciadas. Aunque aquí, lejos de competir, el objetivo era luchar por ser el más original en los diseños.

La corrida de cintas y la gran verbena ya por la noche con la orquesta Azahar completaron una jornada inolvidable que ayer tuvo su broche de oro con el festival de juegos infantiles en el campo de fútbol siete y que fue un auténtico éxito de participación. El municipio despidió estas fiestas con música, protagonista durante estos días, a través del Festival de Rock.