Fiesta ibicenca para despedir septiembre

HUÉRCAL DE ALMERÍA

70 vecinos huercaleños disfrutan con una cena, juegos y bailes que se celebran cada año para dar la bienvenida al otoño

Fiesta ibicenca para despedir septiembre
Tito Sánchez Núñez

Huércal de Almería, 29 de septiembre 2019 - 04:00

Cuando el mes de septiembre languidece y el verano agoniza, más de medio centenar de vecinos del Barrio Visiedo de Huércal de Almería suelen celebrar la que los mayores denominan como la ‘Fiesta de Blanco’ y que consiste en una fiesta ibicenca.

La Asociación de Vecinos de este barrio huercalense lleva organizando esta jornada de convivencia de forma anual y se ha convertido ya en toda una tradición.

Con el cambio de estación, la fiesta ibicenca despide el verano y da la bienvenida al otoño con una cena y juegos en la que el objetivo primordial es el de compartir la velada y divertirse en compañía.

En esta ocasión fueron más de 70 los socios de la Asociación de Vecinos del Barrio Visiedo que se dieron cita en la sede situada en el antiguo Campo de Fútbol Villa de San Pablo. Entre todos, de blanco impoluto como mandan los cánones de una fiesta ibicenca, compraron y prepararon la cena, consistente principalmente en aperitivos y dispuesta a lo largo y ancho de una larga mesa para acoger a todos los asistentes.

A las nueve de la noche comenzó la velada y desde bien pronto empezó la diversión. El programa no daba tiempo siquiera a terminar la cena para dar inicio a los bailes y es que las 70 personas, divididas en grupos de diez, tuvieron que levantarse a mover el cuerpo durante el refrigerio.

Al son de las llamadas canciones del verano de las últimas décadas, como la ‘Macarena’ o ‘La Mayonesa’, cada uno de estos grupos tenía que interrumpir su cena y levantarse para realizar las coreografías de estos conocidos temas musicales.

De todos los grupos, uno resultó ganador y se llevó como premio una tarta de tiramisú. Al mismo tiempo, se organizaron otra serie de juegos y actividades como juegos de baile, un fotocall en el que los asistentes pudieron improvisar nuevos ‘looks’ con sombreros, gafas, máscaras, eplucas y disfraces y también el tradicional juego de la silla, donde el ganador también se llevó otra tarta como premio, en este caso de chocolate blanco.

Con una decoración ambientada en este tipo de fiestas, con predominio del color blanco y velas, los participantes en esta despedida del verano se divirtieron comiendo y bailando hasta entrar en la madrugada. En septiembre del año que viene, los vecinos volverán a preguntar cuándo tendrá lugar la ‘Fiesta de Blanco’.

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