Alertan del riesgo por partículas radioactivas en la zona donde se prevé construir 1.600 casas en Palomares
Cuevas del Almanzora
El presidente de Ecologistas en Acción, José Ignacio Domínguez, alerta de que "las partículas de plutonio se mueven con el viento"
59 años de Palomares: Franco y EE. UU. usaron a los vecinos para experimentar en Almería
La aprobación ambiental por parte de la Junta de Andalucía al proyecto que prevé construir una gran urbanización de 1.600 viviendas en primera línea de playa en la pedanía cuevana de Palomares ha reavivado las preocupaciones sobre la contaminación radioactiva aún presente en la zona tras el accidente nuclear de 1966. José Ignacio Domínguez, coordinador provincial de Ecologistas en Acción y antiguo presidente de la asociación Amigos del Parque Natural de Cabo de Gata, ha advertido de que las obras podrían remover materiales contaminados por plutonio y americio, lo que, según afirma, supondría un "riesgo para vecinos, trabajadores y visitantes".
Domínguez recuerda que, tras la caída de varias bombas termonucleares estadounidenses en 1966, una parte del terreno quedó afectada por la presencia de partículas radiactivas que, aunque concentradas en áreas valladas, pueden desplazarse y persistir en el subsuelo. “Las partículas de plutonio y americio no permanecen estables; se mueven con el viento, con el agua y también a través de la fauna silvestre y doméstica”, señala. Asegura, además, que en la playa de Quitapellejos —situada junto al sector donde está previsto construir— “los vehículos que habían pasado por las zonas contaminadas eran lavados con agua dulce durante meses, por lo que el polvo radioactivo quedó allí depositado. Eso está todo contaminado. No sabemos a qué profundidad, pero está”, apunta muy preocupado.
En este sentido, Domínguez advierte de que el movimiento de tierras para cimentaciones podría reintroducir parte de ese material a la superficie. “Si levantan la zona para hacer los cimientos, van a levantar también el plutonio. Yo recomiendo que nadie se acerque por allí si comienzan las obras y, si lo hacen, que usen una mascarilla potente”, afirma. Ecologistas en Acción, el GEN y otros colectivos ya preparan alegaciones contra el proyecto.
Así es el proyecto
Unas reacciones que llegan tras la emisión por parte de la Consejería de Medio Ambiente de un informe favorable al desarrollo urbanístico en el sector PA-4 de Palomares. El plan contempla la edificación de bloques de cuatro plantas con 936 viviendas y otras 664 casas unifamiliares, además de un hotel, zonas verdes, espacios educativos, instalaciones deportivas y un paseo marítimo de 2,2 kilómetros entre la rambla del Jatico y la desembocadura del río Almanzora.
El suelo, actualmente sin edificaciones salvo por una estación de servicio, se transformaría en una nueva área residencial con capacidad para casi 1.000 plazas de aparcamiento y más de 200.000 metros cuadrados de espacios libres. La Junta de Compensación, formada por más de 90 propietarios, está liderada por el grupo británico Bay Holland, que ha mostrado intención de iniciar cuanto antes una primera promoción de 240 viviendas.
La autorización ambiental tiene una validez de cuatro años, plazo en el que deberán iniciarse las obras para no perder vigencia. Mientras tanto, el debate sobre el equilibrio entre desarrollo urbanístico y seguridad ambiental vuelve a situar a Palomares en el centro de la discusión pública.
Temas relacionados
No hay comentarios