Las fiestas de Aguadulce echaron el cierre hasta el próximo año con la última de las celebraciones religiosas multitudinarias de este año, desarrollada en la tarde noche de ayer: la procesión de la Virgen del Carmen por las calles del barrio roquetero justo el día de su onomástica.

La procesión resultó multitudinaria.

Junto al recorrido marítimo y la concurrida misa celebrada en el Puerto de Aguadulce en la jornada del lunes, el cortejo de ayer fue sin duda el acto más multitudinario de todos los celebrados en el programa festivo, que arrancaba el pasado sábado.

Primer plano de la imagen de la Virgen del Carmen de Aguadulce.

La moderna parroquia homónima se abarrotó desde las 20:00 horas para una ceremonia religiosa que contó con la presencia de las autoridades municipales, encabezadas por el alcalde de Roquetas de Mar, Gabriel Amat. Tras la Misa del día del Carmen, patrona de Aguadulce y de toda la gente del mar, la imagen restaurada de la Virgen alcanzaba las calles de Aguadulce desde la puerta de Poniente del templo, bajo una lluvia de pétalos, iniciando un recorrido que la llevaría por las calles Santa Mónica, Guadalupe, Pasadena, Michigan, Plaza de Lima, Avenida de Santa Fe, Avenida Carlos III y por último calle Virgen del Carmen, desde donde el cortejo volvió a acceder al templo, esta vez por la puerta de Levante.

Gabriel Amat y Juanjo Salvador, en la comitiva de autoridades.

Sin duda uno de los momentos más emotivos y tradicionales se vivió en la Avenida Carlos III, cuando como es tradición se entonó el himno de la Virgen. A la Hermandad de la Virgen del Carmen, la más veterana de las hermandades roqueteras, le acompañaban representantes de las distintas hermandades del municipio así como los sones de la Unión Musical de Roquetas de Mar. De igual modo, otra de las características de esta procesión es la pirotecnia, que estuvo muy presente durante todo el recorrido, de inicio a fin.