Este Viernes Santo, cuando los primeros rayos del sol caigan sobre la Plaza Mayor de Vera, allí no estará su patrona, la Virgen de las Angustias, esperando a los miles de veratenses que cumplen con la tradición de la ‘subida de Jesús’ para escuchar el pregón del judío. Ni esa noche saldrá a las calles casi en penumbra, acompañada por un trío de capilla y un cuarteto vocal, junto al Santo Sepulcro y el Cristo de la Columna.

La crisis sanitaria pospondrá un año los momentos más esperados y emotivos para todos los cofrades, pero eso no ha impedido que el Viernes Santo se reinvente, viéndolo y viviéndolo a través de los ojos de los niños.La Hermandad de Nuestra Señora la Virgen de las Angustias ha organizado un concurso para que los más pequeños de la casa plasmen en papel, dibujando, cómo viven ellos la noche del Viernes Santo veratense.

Más de una decena de niños han enviado sus obras, en las que reflejan sus momentos favoritos de la estación de penitencia: el paso de palio de la patrona de Vera; la ermita de la Virgen; nos penitentes: el estandarte del Santo Sepulcro, con el rostro del Cristo yacente y el cerro del Espíritu Santo al fondo...

Una vez que acabe el confinamiento, habrá una gran fiesta de hermandad y se entregarán premios con diferentes categorías, en los que tendrán en cuenta la originalidad, creatividad y el esfuerzo de los artistas.Niños, de cuatro años en adelante, se han sumado a este concurso con el que la hermandad ha llenado su Facebook con imágenes de su día grande.

Todo ello en un año especialmente triste, pues la Virgen de las Angustias no ha podido aún regresar de Sevilla, en donde estaba siendo restaurada, por el estado de alarma.