El Almería desafía la lógica en su intento por tumbar al Oviedo

Es la más difícil todavía. Con un resultado en contra y con bajas muy importantes, la UD Almería se aferra a la épica para estar en la final del playoff de ascenso a Primera División. Nacho Vidal tumbó al equipo rojiblanco con un gol en el descuento en un encuentro en el que los locales tuvieron serias opciones de ponerse por delante en el marcador en varias ocasiones. Sin embargo, el equipo almeriense tendrá que ganar por dos goles de ventaja si quieren superar a su rival en el feudo carbayón.

El mayor hándicap del equipo unionista es su dinámica fuera de casa. En los últimos nueve partidos a domicilio, la tropa de Rubi encadena siete derrotas y dos empates. En la segunda vuelta del campeonato, el equipo solo ha sumado cinco puntos, el peor dato del club en una temporada en Segunda División en toda su historia. Sin embargo, en los dos últimos precedentes (Cádiz y Mirandés), la mejora competitiva refuerza a los indálicos de cara a su visita al Carlos Tartiere.

Además del mal momento como visitante, el Almería se la jugará contra un equipo intratable. Desde la llegada de Veljko Paunović al banquillo del Real Oviedo, los asturianos no han perdido, con ocho triunfos y tres empates en el tramo final del campeonato liguero. Los asturianos han metido la directa rumbo a Primera División a falta de tres partidos, pero primero tendrán que rematar esta primera ronda del playoff.

La situación, ya de por sí adversa, es todavía más compleja por las ausencias que tendrá el conjunto indálico para la vuelta de esta eliminatoria. A las ausencias de Marc Pubill y Luis Suárez (todavía no se descarta la vuelta del colombiano al cien por cien, dicho por Rubi), se puede unir la de Leo Baptistao. El brasileño se retiró del terreno de juego con problemas musculares y puede perderse el choque del próximo miércoles. Además, Lucas Robertone también es duda para la vuelta.

Una respuesta sobresaliente

Con todo en contra, por lo menos sobre el papel, la respuesta del equipo fue sobresaliente. El colectivo se impuso a la lógica y la UDA fue superior a su rival, especialmente en el segundo tiempo. Dion Lopy dio un recital desde la medular y Sergio Arribas asumió el protagonismo. Solo faltó acierto de cara a portería, con dos clarísimas oportunidades de Lázaro Vinicius y el remate de Gonzalo Melero a la salida de un saque de esquina que salvó Nacho Vidal, héroe de los visitantes tanto en el lado ofensivo como defensivo.

La eliminatoria no está cerrada, por lo que una de las claves de la vuelta será que los almerienses se adelanten en el marcador, tal y como señaló Rubi en sala de prensa. El técnico de Vilassar de Mar, que apostó por Marezi como referencia, puede introducir novedades en el once, ya que Puigmal demostró que está más que capacitado para jugar de inicio un encuentro de estas características. Quedan noventa minutos y este equipo, en los peores contextos, es cuando mejor ha respondido. Será o no será, pero los rojiblancos van con toda la confianza a tierras oventenses.