Así te hemos contado el Real Valladolid 3-1 Almería: los rojiblancos, en la lona

Prueba de fuego en Pucela. El Almería, tras la primera derrota del curso ante el Racing, necesitaba revertir la dinámica con un buen resultado en el José Zorrilla. El propósito de los rojiblancos era mantener la constancia durante todo el partido y el orden defensivo, un bloque compacto y explotar la velocidad de sus atacantes como su arma más peligrosa para hacer daño al adversario. Para ello, el técnico catalán apostó por tres cambios en la alineación con la entrada de Daijiro Chirino y Nelson Monte en el centro de la zaga y Stefan Dzodic, que acompañará a Gui Guedes en la medular.

En el primer tiempo, los rojiblancos tuvieron una oportunidad de oro para adelantarse en el marcador con un penalti a favor. Sin embargo, Adrián Embarba erró y, en la primera ocasión de los blaquivioletas, Marco André puso por delante al Real Valladolid. Federico Bonini igualó el marcador en una falta frontal botada por Sergio Arribas, pero un fuera de juego posicional de Gui Guedes provocó que Dámaso Arcediano acudiese a la sala VOR para anular el tanto. En el descuento, Amath y Nelson Monte disfrutaron de dos acciones para cambiar el guion de esta contienda, pero ninguno de los dos acertó.

Tras el paso por los vestuarios, el plantel pucelano metió una marcha más para asumir el mando de un partido del que los unionistas se desconectaron. Durante muchos minutos, la UDA no generó ocasiones de peligro y el Valladolid se instaló en el campo contrario. Sin embargo, el segundo penalti a favor de los indálicos sí acabó en gol, obra de Sergio Arribas, que le dedicó el tanto a su hijo Marco. Thalys y Aridane, dos últimos refuerzos de este mercado estival, debutaron en el José Zorrilla. En los últimos compases, Juanmi Latasa decidió el choque tras un debatible penalti de Federico Bonini que provocó la segunda derrota de la temporada para los almerienses. Maroto remató la contienda en el minuto 99.