Descubriendo el pasado de Ohanes en una noche mágica llena de tradición

Un pregón perceptible desde cualquier zona del pueblo avisaba a los habitantes de que el tráfico quedaría cortado a partir de las ocho de la tarde. Pocos minutos después daría comienzo la Tercera Edición de la Noche de Cultura y Tradición de Ohanes que tuvo lugar el sábado. Un evento mágico en el que las calles se llenan de escenarios donde se puede ver desde una reconstrucción de cómo eran las calles en los años 50, solo apta para los más valientes, hasta una bruja buena contando cuentos y leyendas de la villa. La presentación corrió a cargo del periodista José Antonio Fuentes. En su transcurso se vivió uno de los momentos más emotivos, cuando los sobrinos de Emilio Márquez, Juan Antonio y Ramón, subieron al escenario a recoger una placa en su honor a título póstumo. Emilio padecía una parálisis cerebral que no le impidió dedicarse a la carpintería y tener su propio taller, que también pudo ser visitado.

La tradicional cata de vinos fue el pistoletazo de salida del evento, en la que un jurado de diez personas probó los caldos de los viñedos de la zona. El primer escenario se encontraba justo en la misma plaza de Miguel Vizcaíno. En él se pudo ver el taller de carpintería de Emilio, un ejemplo de superación, así como una recopilación de fotos de su vida. El segundo escenario era la Iglesia de la Inmaculada Concepción, en la que se situó una exposición formada por el vestuario y los mantos de la patrona del pueblo, la Virgen de Consolación de Tices y los de la Virgen de los Dolores.

También estaban los estandartes que siempre salen en procesión y las capillas con santos que van de casa en casa como símbolo de protección. Como en ediciones pasadas, se pudieron visitar cuatro casas centenarias en las que bellos patios tienen como protagonistas mosaicos de piedra en el suelo y vertiginosos techos de madera. En ellas se podía disfrutar de una colección de imágenes de Juan Antonio Muñoz y de una colección de monedas y billetes de José Miguel Valverde, un estudiante de Derecho que desde los 7 años se dedica a reunir estos objetos. "Cuando empecé era como un juego y desde entonces no he dejado de seguir con la colección". La moneda más antigua data de la época de los Reyes Católicos, sobre 1490. Y el billete más antiguo es de 1896, de Cuba, cuando esta todavía era una colonia española.

La reconstrucción de la calle antigua fue una de las grandes sorpresas de esta edición, donde el basto empedrado y las 'palometas', antiguas lámparas que daban luz a las calles, fueron los protagonistas. Una antigua cuadra con su alpaca de paja, un carro antiguo, espuertas, mosqueros y garrafas, fue otro de los espacios que los asistentes puedieron observar en las calles.

Las minas de agua y manantiales que abastecen el campo también fueron protagonistas de este evento. Se pudieron ver en grandes fotografías acompañadas por el sonido del agua y de los alegres pajarillos. Otra exposición fotográfica de la que se pudo disfrutar fue la de José Domingo Puertas, profesor del colegio del municipio que lleva más de treinta años allí y que ha captado la esencia del día a día en Ohanes.

Un vestido de boda de 1950, nada que ver con lo que podemos imaginar hoy en día, de terciopelo negro y por debajo de la rodilla. Esta era una de las piezas que se pudieron ver en el escenario 'Nos vamos de boda', donde había unos 40 vestidos de novia de las vecinas del pueblo acompañados de las fotografías del feliz enlace.

Y de ahí a un escenario mucho más oscuro, en el que la luz de las velas acompaña a una bruja, en este caso buena, llamada Joaquina Ferre, donde grandes y pequeños disfrutaron de cuentos y leyendas del pueblo. Joaquina es profesora de música y en los últimos años se ha dedicado a hacer una recopilación de las leyendas del pueblo de la mano de los más mayores.

En el último escenario tuvo lugar la teatralización de "La batalla de Ohanez, último bastión Morisco", en la que se produjo una recreación de la procesión del Marqués de los Vélez celebrando su triunfo junto con las doncellas que se salvaron de aquella masacre. José Luis Valverde fue el encargado de narrar la historia. También se instalaron un campamento moro y otro cristiano.

Los habitantes y curiosos que se acercaron a esta cita pudieron disfrutar además de las actuaciones del cantante Antonio Álvarez y de los grupos Swing Quarter y Ruta 80. La fiesta se prolongó hasta altas horas de la madrugada y un año más esta noche volvió a ser un éxito.

El alcalde, Eufronio Hernández, la concejal de cultura, Rafaela Ortega y Ángel Martínez, organizador del evento, agradecieron el esfuerzo y la colaboración vecinal que hace posible que se produzca un viaje en el tiempo para conocer cómo es la cultura y tradición de este pueblo.