Almería

LAROYA. Emprendedora publicitaria, escritora imaginativa

Emprendedora publicitaria, escritora imaginativa

Emprendedora publicitaria, escritora imaginativa

No es casual que Araceli Sobrino Martínez esté coordinando para la Federación de Mujeres del Poniente y la Alpujarra por la Igualdad el proyecto <Historia de Almería en Femenino>, enciclopedia en formato digital que pretende reunir vivencias de mujeres de toda la provincia: anónimas, sacrificadas en el hogar y trabajo y ausentes de los diccionarios al uso. Tampoco es fortuito el que se encuentre instalada en una sostenida meseta de creatividad tras una discontinua y fructífera trayectoria vital que comenzó en los Filabres y se remansó en Almerimar. Aunque nunca ha dudado en regresar a su Laroya natal en periodos más o menos largos. Aquí se casó con Antonio López, en agosto 2001, segundas nupcias (lo que supuso la primera ceremonia civil en el pueblo); a la sombra del chopo donde hoy un marmóreo pedestal recuerda los célebres (y no suficientemente explicados) “fuegos espontáneos de Laroya” en los pasados años cuarenta. Además, Araceli lleva con orgullo el haber sido pregonera de sus fiestas patronales en 2016.  No es casual que Araceli Sobrino Martínez esté coordinando para la Federación de Mujeres del Poniente y la Alpujarra por la Igualdad el proyecto <Historia de Almería en Femenino>, enciclopedia en formato digital que pretende reunir vivencias de mujeres de toda la provincia: anónimas, sacrificadas en el hogar y trabajo y ausentes de los diccionarios al uso. Tampoco es fortuito el que se encuentre instalada en una sostenida meseta de creatividad tras una discontinua y fructífera trayectoria vital que comenzó en los Filabres y se remansó en Almerimar. Aunque nunca ha dudado en regresar a su Laroya natal en periodos más o menos largos. Aquí se casó con Antonio López, en agosto 2001, segundas nupcias (lo que supuso la primera ceremonia civil en el pueblo); a la sombra del chopo donde hoy un marmóreo pedestal recuerda los célebres (y no suficientemente explicados) “fuegos espontáneos de Laroya” en los pasados años cuarenta. Además, Araceli lleva con orgullo el haber sido pregonera de sus fiestas patronales en 2016. 

Araceli Sobrino y Antonio López, agosto 2001 Araceli Sobrino y Antonio López, agosto 2001

Araceli Sobrino y Antonio López, agosto 2001

Pero regresemos a los orígenes. No resultaba tarea fácil alimentar nueve bocas en aquella época de carencias materiales y negrura política, en esa Almería de interior que desde la centuria decimonónica viene vaciándose de personas sin contenerse la sangría. El pluriempleo a destajo era la única salida para lograr el mínimo bienestar hogareño: pastor, laboreo en el campo, molinero, albañilería, ocupados en el olivar y la vid… Fue el caso de Enrique Sobrino y Luisa Martínez, padres de Araceli, sexta (y melliza) de siete hermanos. Nacida el 8 de julio de 1962 en un cortijo del paraje de la Fuente del Saz, en la sierra filabresa, y bautizada en la parroquial de San Ramón Nonato -iglesia neoclásica del s.XVIII, rediseñada por el arquitecto Juan Antº Munar-, en el recóndito Laroya, a un suspiro de Macael, capitalidad del entorno serrano. Del padre aprendió el valor de la lealtad y de la madre, de ascendencia velezana, el inconformismo.

De la Sierra a Almerimar

Hacia 1966 la unidad familiar se trasladó a Olula del Río para trabajar en el “mármol” o donde obtener un jornal. Durante un lustro asistió al internado de monjas en Albóx y Tíjola y al Nacional Mixto “Antonio Relaño”, en la propia localidad. Una formación escolar irregular e insuficiente -interrumpida por las temporadas de temporeros en Francia- que debió esperar a tiempos mejores, ya a edad adulta. Su etapa de migrante se complementó con una estancia (1977) en Andorra, en el que sería su primer acercamiento al márquetin comercial, relacionándose con marcas francesas tipo Chanel, Lancome o Dior. En 1984 se estableció en El Ejido con su único hijo, Abel, fruto de un primer matrimonio fallido. Fechas difíciles, en solitario, con los invernaderos y almacenes de manipulado como fuente de ingresos. Nos confiesa que sin vacaciones ni descanso, “la lectura se convirtió en mi único ocio posible”. 

Araceli aprovechó la crisis económica del 92 para proyectarse en el ámbito publicitario, con diferentes responsabilidades en Antena 3 Radio, revista Hortofrutícola del Poniente, La Gaceta y en funciones de imagen del Poli Ejido, Dos años después, atendiendo al negocio comercializador del invernadero, fundó -con dos socios- la agencia Tricolor Diseño y Publicidad. Una década de vértigo, la de los 90, “para nuestra historia hortícola y de su expansión, ya que como directora firmé acuerdos con multinacionales del cartón que operaban en la zona y con ella transformamos la imagen de marcas de las comercializadoras“.

Pueblo Pueblo

Pueblo

Referencias literarias

Al iniciarse el nuevo milenio le dio una vuelta de tuerca a su biografía en el afán de recuperar enseñanzas que las carencias económicas familiares no le permitieron cubrir durante su infancia y adolescencia. Su objetivo prioritario ahora es el estudio reglado y universitario. Para ello se matriculó en la Universidad a Distancia (UNED), en Filología Hispánica, en la rama de Lengua y Literatura Española.Sus publicaciones están habitadas de forma intencionada por mujeres que dan vida a personajes que se caracterizan por su fuerza y determinación. Con ello la autora pretende subvertir el papel anodino y secundario que a lo largo de la historia se le ha asignado a la mujer en la literatura y fuera de ella. Veamos: 

-La Seda de Candeleire (2013) y La Otra Orilla (2014) novelas contextualizada en dos momentos fascinantes de la historia almeriense, con el trasfondo de la toma de los RR. CC. y el cambio social y cultural que ello conllevó. En ellas los pueblos y paisajes del norte de la provincia de Almería nos hacen regresar a los siglos XV y XVI, a mezclarnos con sus gentes, con las mujeres que soportan el peso de la historia.

-En Macarrones con Tomate (2016) Araceli nos sorprende con un nuevo género narrativo: la comedia. Sus protagonistas viven una delirante aventura donde los valores de la amistad y la solidaridad femenina son el catalizador de la historia.

-El castillo, el hogar que creó un Fajardo (Colección Relatos Velezanos, 2016)

-Templum Lapideum. Colección Narradores Almerienses. (AA.VV) Arráez Editores. (2016)

-Mujeres de Tierra Almerienses (2017), libro que visibiliza el trabajo de la mujer en sectores primarios como la agricultura y la ganadería, donde estas muestran que asimismo pueden son líderes y pioneras frente al pretendido dominio de los hombres.

-Derechos incumplidos en la mujer (2018) (AA.VV), con “El poder del patriarcado”; título fruto de los encuentros de Lecturas por la Igualdad que promueve Ana María Callejón Callejón.

Con residencia en Almerimar (El Ejido), compatibiliza su faceta de narradora con talleres de escritura y encuentros con lectores en colegios, bibliotecas y clubes de lectura; así como la participación en foros y mesas de debates allá donde su voz se deje oír en defensa de los derechos de la mujer y su papel en la sociedad.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios