Manuel Martínez Egea pronuncia el discurso de la Virgen de los Dolores de Vélez Rubio

La Iglesia de la Encarnación de Vélez-Rubio acogió el pasado sábado la celebración del XVII Pregón organizado por la Tradicional Hermandad de Nuestra Señora de los Dolores de Vélez-Rubio. Al finalizar la Santa Misa hizo entrada en la iglesia la Banda de Cornetas y Tambores de esta Hermandad, cuya actuación dio paso a la intervención del mayordomo, Roque García, que dio la bienvenida a todos los allí presentes, autoridades municipales, mayordomos y miembros de las distintas hermandades y cofradías de Vélez-Rubio y un gran número de vecinos del municipio que no quisieron perderse este acontecimiento. Tras la intervención del mayordomo, fue Juan Carlos Sánchez, pregonero de la Semana Santa 2010, el encargado de presentar a su sucesor en el cargo este año, Manuel Martínez Egea. Fue este el que a continuación tomó la palabra para ofrecer a los allí presentes un pregón escrito con el corazón, emotivo y de un marcado sentir religioso. Una experiencia que no era nueva para él, ya que en el año 2007 fue el encargado de ofrecer el X Pregón que organiza la Junta de Cofradías.

En esta ocasión, como no podía ser de otra forma, fue gran protagonista de su pregón la Madre de Dios, "la bondad, la inocencia, la virginidad de María", "Purísima, Inmaculada", así aparece siempre en el Evangelio, "busques donde busques, y leas donde leas". Y de la mano de la Dolorosa, Martínez Egea recordó los que para él son los momentos más significativos y emotivos de la Semana Santa de Vélez-Rubio, recuerdos que le llevó a sus años de infancia, "cuando el Domingo de Ramos, me despertaba juntos a mis hermanos, nervioso, y con una ansiedad inusitada, era el primer día que nos vestíamos de café con leche para acompañar a 'los esclavos' en la entrada de Jesús a lomos de la borriquita en la plaza de nuestro pueblo".