Megino defiende El Corte Inglés en el edificio "sin valor histórico" de La Salle

El concejal de Urbanismo del Ayuntamiento de Almería, Juan Megino, defendió ayer la implantación de El Corte Inglés en el solar resultante del derribo del edificio ocupado ahora por el colegio La Salle, el cual, en su opinión, no goza de ningún valor arquitectónico, pese a que su autoría corresponde al arquitecto almeriense Guillermo Langle, homenajeado por la Junta y objeto de visitas guiadas organizadas por el Consistorio.

El responsable municipal mantiene hoy la anunciada reunión con la delegada provincial de Cultura, Yolanda Callejón, centrada en el Plan General de Ordenación Urbana, en el nuevo catálogo de edificios protegidos que engloba el PGOU y, dentro de este capítulo, la posible inclusión en el listado de inmuebles intocables del edificio de La Salle o de su fachada. "Ha cumplido más de un siglo y pico lo único que queda del original es la fachada, en el interior se ha retocado todo y cuando digo todo es todo", afirmó el edil, quien añadió que el inmueble no tiene a su juicio ningún valor arquitectónico o histórico, salvo el sentimental. "Entiendo que haya mucha gente que ha estudiado allí a la que le gustaría que se mantuviera el edificio" pero, insistió Megino, "no se puede sostener valores históricos y arquitectónicos cuando hasta la altura de las crujías originales es distinta".

El responsable municipal convidará por ello a la delegada de Cultura a no iniciar expediente alguno para la protección de La Salle, así como de la fachada del centro escolar, al considerar que ello podría suponer una paralización de la instalación de El Corte Inglés, cuando mantiene que este inmueble no figura en el catálogo de 1998 pese a que la anterior responsable de la Delegación de Cultura, Ana Celia Soler, afirmaba justo lo contrario.

De igual modo pedirá la descatalogación de otros edificios en mal estado, avanzando el concejal una nueva ordenanza para la conservación de inmuebles, así como no tener que realizar estudios prospectivos y arqueológicos de todo el suelo urbanizable para poder aprobar el PGOU.