La Unión Federal de Policía (UFP) ha solicitado que, "ante la mayor transmibilidad de las nuevas cepas de SARS-CoV-2, la implantación del uso de FFP2 a la población en general en multitud de países y la posible en España", se facilite a los policías nacionales una mascarilla de este tipo, independientemente del destino en el que presten sus servicios, para cumplir la normativa de riesgos laborales y el derecho a una protección "eficaz de la salud de los funcionarios".

La UFP recuerda que se han confirmado más de 3,6 millones de casos de Covid-19 en España desde el inicio de la pandemia, así como que en "las últimas semanas" se han detectado mutaciones del virus que lo hacen más contagioso, como las cepas británicas o la sudafricana. En esta línea, apunta que, según la OMS, la variante británica circula por sesenta países y es un 70% más transmisible que la inicial.

Subrayan que en países como Alemania, Francia y Austria ya se está regulando el uso de las FFP2 a la población general y que, por ejemplo, en Francia se han prohibido las mascarillas de tela que filtren menos del 70%.

"Los policías nacionales para identificar, detener, cachear, sancionar y actuar tienen que estar en contacto directo, próximo y a veces estrecho con los ciudadanos, los cuales pueden ser potenciales portadores del Covid-19", añaden, apostillando que las vacunas no evitan la transmisión, por lo que un agente vacunado puede contagiarse y transmitir la enfermedad a sus familiares.