Tráfico controla que las empresas de transporte escolar cumplen las normas
Velocidad inadecuada y distracciones son las principales causas de los accidentes en estos vehículos que transportan menores
La Dirección General de Tráfico ha iniciado una campaña de control y vigilancia del transporte escolar en la que comprobará que los autobuses que transportan a los escolares cumplen realmente con la normativa. La velocidad inadecuada a las condiciones de la vía y las distracciones siguen siendo, según la DGT, las causas principales de este tipo de accidentes.
El primer control, de carácter administrativo, consistirá en comprobar que las autorizaciones y documentos que deben tener dichos vehículos sean los correctos para la prestación del servicio. Posteriormente, los agentes verificarán que las condiciones técnicas y elementos de seguridad del vehículo son los que exige la normativa, así como los requisitos especiales que debe cumplir el propio conductor, como son el permiso de conducción o los tiempos de circulación y descanso.
La iniciativa se enmarca dentro de las campañas que la DGT realiza periódicamente con objeto de velar por que los menores que utilizan este medio de transporte para acudir al colegio, lo hagan de la forma más segura.
Desde el curso escolar 2007-2008, todos los vehículos dedicados al transporte escolar deben cumplir todos los requisitos que se recogen en la normativa sobre condiciones de seguridad, en el que se estipula la obligatoriedad de que los menores vayan acompañados en el autobús por una persona debidamente cualificada, la antigüedad máxima, el seguro de responsabilidad civil ilimitado, las tasas de alcohol en sangre y aire espirado, o la obligatoriedad de llevar la señal de transporte escolar, o cinturones de seguridad, entre otros.
Especial hincapié se hará en la utilización de los cinturones de seguridad y sistemas de retención, en aquellos vehículos que los lleven instalados. Por este motivo, la Unión Europea emitió una Directiva Comunitaria, que España ha puesto a su ordenamiento jurídico y que establece que desde octubre de 2007, tanto en España como en el resto de países miembros se deniega la matriculación de cualquier autobús que no tengan instalados los sistemas de retención.
Además, la ley es particularmente minuciosa en lo referente a los asientos enfrentados a pasillo de aquellos vehículos con más de nueve plazas dedicadas a este tipo de transporte, ya que solamente podrán ser ocupados por menores de 16 años cuando dichos asientos lleven instalados cinturones de seguridad.
A pesar de que la campaña intensiva se realiza durante un mes, los agentes de Tráfico continuarán realizando las inspecciones durante todo el curso escolar.
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