barrios

Los vecinos de Pescadería se tienen que ir con la pesca a otra parte

  • La Autoridad Portuaria los aleja del muelle remitiéndose a la Ley de Puertos

Uno de los vecinos del barrio, mientras pesca en el muelle pesquero del Puerto de Almería.

Uno de los vecinos del barrio, mientras pesca en el muelle pesquero del Puerto de Almería. / DDA (Almería)

“Era un crío cuando mi padre me cogía de la mano y me llevaba hasta el puerto pesquero, junto al barrio. Y, desde entonces, los vecinos del barrio hemos estado haciéndolo”, explica Antonio, vecino de Pescadería y atado al mar desde niño.

Hace cinco años, con la entrada de Jesús Caicedo a la presidencia de la Autoridad Portuaria, los vecinos del barrio de Pescadería que cumplieran una serie de requisitos, como ser jubilado o parado de larga duración, recibieron un permiso para poder acceder al Puerto Pesquero. Se les dio una tarjeta con la que superar las barreras.

Sin embargo, estas tarjetas han sido desactivadas. Las 40 personas que tenían permiso para acceder el puerto a realizar pesca recreativa no pueden hacerlo. La Chanca-Pescadería se va con la pesca a otra parte. Al menos, de momento.

Permiso del que disponían los vecinos para entrar al Puerto. Permiso del que  disponían los vecinos para entrar al Puerto.

Permiso del que disponían los vecinos para entrar al Puerto. / DDA (Almería)

Y eso es lo que los vecinos no quieren que suceda. Aseguran que todo viene dado desde un problema que se produjo hace dos meses y que es totalmente ajeno a su actividad: “Un hombre que pescaba en silla de ruedas, por su discapacidad, cayó al agua porque su caña se enganchó a un barco y no la soltó. Pero este hombre ni es del barrio ni dispone de nuestros permisos. No tiene nada que ver con nosotros”, explica Antonino.

“Fue entonces cuando la nueva dirección del Puerto decidió que no podíamos entrar más. El pasado domingo, mis compañeros entraron al puerto y cuando iban a salir tenían las tarjetas desactivadas”, añade Antonino, representante de los pescadores.

Antonio asegura que se le dieron varios motivos, uno, el accidente que se produjo. “Pero además de no tener nada que ver con nosotros, la caída de este hombre se dio hace ya más de dos meses”. El otro motivo, la normativa. “Se nos ha expuesto que por Ley no podemos acceder al Puerto para realizar ningún tipo de pesca”.

Es cierto que la Ley lo impide, pero los vecinos no entienden porqué antes sí se les permitía y, ahora, de repente, no. Realmente, el artículo 72 Del RDL 2/2011, de 5 de septiembre, por el que se aprobó el Texto Refundido de la Ley de Puertos del Estado y de la Marina Mercante establece que en el dominio público portuario sólo podrán llevarse a cabo actividades, instalaciones y construcciones acordes con los usos portuarios y de señalización marítima, de conformidad con lo establecido en dicha ley. Los motivos para prohibir la pesca y el baño tienen que ver con la seguridad.

A tal efecto, tienen la consideración de usos portuarios el comercial, entre los que figuran los relacionados con el intercambio entre modos de transporte, los relativos al desarrollo de servicios portuarios y otras actividades portuarias comerciales; los usos pesqueros; usos náutico-deportivos; y usos complementarios o auxiliares de los anteriores, incluidos los relativos a actividades logísticas y de almacenaje y los que correspondan a empresas industriales o comerciales cuya localización en el puerto esté justificada por su relación con el tráfico portuario, por el volumen de los tráficos marítimos que generan o por los servicios que prestan a los usuarios del puerto.

Ante esto, los vecinos agregan que, sin embargo, sí se puede realizar la pesca en la zona más cercana al faro del puerto. “No entendemos por qué en un sitio sí y en otro no”.

Según fuentes consultadas por Diario de Almería, pesca recreativa en esta zona del puerto solo puede realizada por personas federadas y siempre bajo supervisión.

“Nosotros también tenemos la licencia de la junta de Andalucía de pesca”, agrega Antonino ante esta apreciación, quien agrega que, a pesar de todo, está aún pendiente de una llamada de Rosario Soto, actual presidenta de la Autoridad Portuaria: “El 19 de enero tuvimos el encuentro con Rosario Soto, me pidió el nombre y el número de teléfono para tener una reunión con los técnicos. Pero todavía no he recibido respuesta. Habrá que esperar, pero de momento no sabemos nada”.

Los vecinos del barrio entienden que "nunca han puesto en riesgo la seguridad de nadie", pues suman décadas realizando este tipo de pesca recreativa “sin haber dado que hablar”. Por ello, piden que no se le achaque la caída de la persona en silla de ruedas, pues “es totalmente ajena” a ellos e incluso “no es ni del barrio de Pescadería”.

“Somos responsables, el menor de toda la gente que pescamos soy yo, que tengo 59 años. En invierno apenas nos juntamos cinco personas y en verano no más de 17 o 18. Tampoco ocupamos nada en el muelle”, agrega Antonino.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios