Dos años de cárcel por robar un móvil a un menor en Almería y golpearlo en la cara
La víctima sufrió lesiones leves tras el robo con violencia, y no pudo recuperar el terminal sustraído
Condenado en Almería por un tirón en plena calle a una mujer que logró recuperar el bolso
Un joven ha sido condenado en Almería a dos años de prisión por un delito de robo con violencia y a un mes de multa por lesiones leves, tras arrebatar a un menor un teléfono móvil en plena calle y agredirlo en la cara al tratar de recuperarlo. Los hechos ocurrieron en la calle Maestro Padilla de la capital almeriense, cuando la víctima caminaba con otros amigos y fue abordada por el ahora condenado, que actuó con intención de lucro y sin provocación previa.
Según se ha declarado probado por conformidad de las partes, el acusado, mayor de edad y sin antecedentes penales, abordó al menor con la excusa de pedirle el teléfono “para una cosa”, a lo que este se negó. El agresor le insistió diciendo que “tenía batería” y “no tenía otro móvil”, hasta que finalmente le arrancó el dispositivo de las manos, un terminal Huawei P40 Lite. Al intentar marcharse, el menor lo siguió y le pidió que se lo devolviera, momento en que recibió un puñetazo en la cara.
El acusado incluso profirió amenazas verbales del tipo “como no encuentre mi pasaporte, te voy a matar”. La víctima sufrió una lesión leve en el pómulo izquierdo, con dolor y edema, requiriendo asistencia médica y dos días de incapacidad para sus actividades habituales. El teléfono sustraído, valorado en 289 euros, no fue recuperado.
En concepto de responsabilidad civil, el condenado deberá indemnizar al menor con 289 euros por el terminal y 150 euros por las lesiones sufridas, además de pagar las costas del proceso. También se le impone la prohibición de aproximarse o comunicarse con la víctima durante tres años por el delito principal, y durante cinco meses por el delito leve.
Pese a la pena privativa de libertad, el tribunal ha acordado suspender la ejecución de la condena durante tres años, condicionado a que el acusado no cometa ningún nuevo delito en ese plazo y satisfaga las indemnizaciones. El joven quedó en libertad por esta causa, al no pesar sobre él ninguna otra orden de detención.
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