Bajan los robos y okupaciones en las segundas viviendas u hogares vacacionales de Almería

Según un estudio de Sector Alarm, las incidencias en estos inmuebles han descendido un 26,9 % en la provincia

Almería es la cuarta ciudad de España con más viviendas okupadas a la venta

Sistema de seguridad en una vivienda.
Sistema de seguridad en una vivienda. / Diario de Almería

Según el Instituto Nacional de Estadística (ECH 2023), cerca de 2,9 millones de hogares españoles cuentan con una segunda vivienda y el Ministerio de Vivienda estima 7,73 millones de viviendas no principales en España. En la provincia de Almería, donde el turismo residencial tiene un peso destacado, la actividad de alarmas en 2025 descendió un 26,9 % respecto al año anterior.

Los datos de Sector Alarm reflejan una mejora generalizada: las incidencias por robo se redujeron un 45,5 %, mientras que las asistenciales bajaron un 11,1 %. Las alertas por fuego y pánico se mantuvieron estables y las de ocupación no registraron variaciones relevantes, consolidando la tendencia de estabilización tras los incrementos observados en años anteriores.

“La preocupación por la seguridad de las segundas residencias es constante, pero vemos cómo las medidas activas ayudan a contener las incidencias. Cada vez más propietarios apuestan por sistemas conectados que garantizan una respuesta inmediata ante cualquier aviso”, señala Jenny Sofie Reneng, directora de Operaciones de Sector Alarm.

De acuerdo con el Portal Estadístico de Criminalidad del Ministerio del Interior, en 2024 se registraron 16.426 denuncias por allanamiento o usurpación de inmuebles en España, un 7,4 % más que el año anterior. Aunque representan una pequeña parte del parque total, su impacto mediático y social genera una creciente sensación de inseguridad entre los propietarios.

En el caso de Almería, los datos de Sector Alarm apuntan a una ausencia de incidencias por ocupación en 2025, un resultado que pone de manifiesto la eficacia de las alarmas verificadas y los protocolos de actuación rápida en viviendas que permanecen vacías gran parte del año.

El sector de la seguridad distingue entre medidas pasivas (cerraduras reforzadas, rejas o persianas) y medidas activas (alarmas conectadas, detección temprana y verificación en tiempo real). Mientras que las primeras sirven de disuasión física, las segundas actúan en el momento crítico: detectan, verifican y permiten una respuesta inmediata ante cualquier incidencia.

“En seguridad, cada segundo cuenta. Una alarma conectada no es solo un sistema tecnológico, sino una herramienta que protege el hogar incluso cuando la familia no está. La verificación de la señal y la activación del protocolo se realiza en menos de 15 segundos”, explica Jenny Sofie Reneng.

La especialización de Sector Alarm en este tipo de viviendas permite ofrecer soluciones adaptadas a las necesidades de los propietarios, especialmente en zonas turísticas o rurales donde la vigilancia es más compleja. Entre sus servicios diferenciales destacan la custodia de llaves y el servicio acuda, que permite el desplazamiento de personal autorizado ante cualquier aviso, garantizando la máxima seguridad sin que el cliente tenga que estar presente.

“Muchos de nuestros clientes confían en nosotros no solo para proteger su vivienda habitual, sino también sus segundas residencias. Algunos incluso cuentan con varias alarmas contratadas con nosotros porque saben que, estén donde estén, su hogar está protegido”, añade Reneng.

Con más de 30 años de experiencia en Europa y más de 700.000 clientes, Sector Alarm se consolida como una de las compañías líderes en sistemas de seguridad para hogares y negocios.

“La seguridad ya no puede concebirse como un complemento. Hoy forma parte de la definición misma de hogar: un espacio protegido incluso a kilómetros de distancia”, concluye Jenny Sofie Reneng.

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