Más de 18.000 casas están vacías en la capital, el 18% del parque de viviendas

Prácticamente dos de cada diez casas construidas en el término municipal de la capital están vacías. Ni se venden ni se alquilan. Es uno de los datos que arroja el nuevo Plan Municipal de la Vivienda, que ha realizado una detallada radiografía del sector y de las necesidades de la población para determinar cuántos hogares demandarán los almerienses durante este próximo decenio y cuántas viviendas de protección se deben facilitar. Un itenerario a seguir de interés tanto para las administraciones públicas como para los empresarios.

El Plan compila una vasta información antes de determinar las posibles estrategias a seguir, que mañana jueves serán analizadas por el alcalde de Almería y el equipo redactor, el estudio de Ferrer Arquitectos, en la jornada de presentación que tendrá lugar en Asempal. Pero como avanzadilla, hay algunos datos que sobresalen. Uno de ellos es el número de viviendas vacías existente en la capital. El Plan Municipal contabiliza exactamente 18.220 casas sin ningún uso, lo que supone el 18,28% del parque de viviendas de la ciudad, compuesto por un total de 99.675 casas, de las cuales el 70% son de primera residencia.

Los redactores del Plan inciden en la infrautilización de estos pisos o unifamiliares vacíos y su potencial. Muchas de estas viviendas además son construcciones recientes. De hecho, según expone el Plan, un tercio de las viviendas de menos de diez años permanece a esta categoría de sin uso -muchas de ellas fueran promovidas con el criterio de segunda residencia-, mientras que el porcentaje se queda en el 25% para las construcciones de más de 50 años.

También aprecian que absorben los peores valores de conservación, necesitando un 15% de actuaciones de rehabilitación para la mejora de sus condiciones de habitabilidad.

Todos estos valores son cruzados por los redactores del Plan Municipal de la Vivienda con otros indicadores como tipologías, perfil del demandante o evolución de la población para vislumbrar los nuevos caminos más acertados que ajusten la construcción con el mercado real de necesidades.

Así el Plan establece líneas estratégicas a seguir por la administración pública, en este caso por el Ayuntamiento a través de su empresa municipal Almería XXI, pero teniendo en cuenta también el camino conjunto a recorrer por otras administraciones, como la Junta de Andalucía, y por la iniciativa privada. En especial, para la viviendas de protección (VP).

De entre las propuestas que recoge el Plan y que serán abordadas en la jornada de mañana jueves, hay una relacionada directamente con las casas vacías. La sugerencia es clara. Invita al Ayuntamiento, al que consideran que ha de liderar las políticas de vivienda de protección, a fomentar el parque residencial de VP en régimen de alquiler, atendiendo a la opción más demandada en la actualidad, por encima de la compra. Proponen la creación de una bolsa de viviendas para su cesión en arrendamiento al que deberían incorporarse esas viviendas deshabitadas. De igual modo, estiman que ha de incentivarse su alquiler a través de programas del Plan Estatal.

El cruce de datos, en los que se han tenido en consideración factores como el crecimiento poblacional, la situación económica o el perfil de demandante de viviendas de protección a partir de las inscripciones del Registro Municipal de VPO, aportan cifras concretas acerca de la estimación de las necesidades de vivienda. Barajando una hipótesis moderada de desarrollo -ni optimista ni pesimista-, indican que los almerienses necesitarán en los próximos diez años unas 4.830 nuevos hogares, de los cuales el 30% consideran que han de ser de protección. Estos es, 1.455 VP.

Las tipologías varían adaptándose a las nuevas familias, recomendando casas para dos personas y viviendas de tamaño suficiente como para acomodar un mayor número de personas como resultado de la reagrupación de familias, efecto de la crisis.