El balance de la criminalidad del tercer trimestre del Ministerio del Interior pone de manifiesto que las infracciones penales cometidas en la provincia de Almería ya han vuelto a los registros prepandemia, después de dos años (2020 y 2021) en los que se produjo un descenso generalizado de los delitos y detenidos asociado a las restricciones motivadas por el coronavirus. La estadística de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado (Policía Nacional y Guardia Civil) recoge 22.547 infracciones penales, lo que supone un 17,5% más que en el mismo periodo del año anterior en el que se contabilizaron 19.191 denuncias. En los nueve primeros meses de 2019 habían sido 20.930, por lo que el principal indicador de la delincuencia en la provincia ha superado los niveles anteriores a la crisis sanitaria por el fuerte tirón de los delitos contra el patrimonio que representan el 42% de la criminalidad convencional en España.

Según los datos facilitados por la Secretaría de Estado de Seguridad, en la provincia se han cometido entre el 1 de enero y 30 de septiembre 517 robos con violencia e intimidación, lo que supone un 36,8% más que en el mismo periodo de 2021, 1.474 robos con fuerza en domicilios, establecimientos y otras instalaciones (24,2% más), 4.205 hurtos (28,3% más) y 247 sustracciones de vehículos (23% más). Son cifras que están ligeramente por debajo a las que se contabilizaron en los nueve primeros meses de 2019, si bien suponen un incremento considerable en relación a los dos años marcados por la pandemia. Se han producido incrementos de los delitos contra el patrimonio en prácticamente todos los grandes municipios de la provincia: en la capital los robos con fuerza en domicilios han crecido un 58% pasando de 181 a 286 y los hurtos de 1.085 a 1.602 (47,6% más), en El Ejido los robos con violencia e intimidación casi se triplican (177,4%) pasando de 31 a 86, en Roquetas los asaltos a domicilios crecen un 63% y en Vícar un 88% más que en el mismo periodo del año pasado.

Mientras que los secuestros desaparecen de la geografía provincial -apenas dos casos en 2021-, hay una tipología penal que no ha dejado de crecer en la última década y que preocupa al conjunto de las administraciones: los delitos contra la libertad e indemnidad sexual. En los nueve primeros meses del año han sido 252 frente a 201 del ejercicio anterior, un 25,4% más, que confirma una tendencia al alza porque fueron 199 en 2020, 164 en 2018 y 138 en 2016. Dentro de este apartado se encuentran las violaciones que han sido denunciadas y entre enero y octubre han sido 37, una más que en el mismo periodo del año pasado. En 2020 se contabilizaron 25, al igual que en 2019, 18 en 2018 y 14 en 2017. En apenas cinco años casi se triplican las agresiones sexuales con penetración retrocediendo a registros de principios de siglo. En relación al último año crecen un 2,8% en Almería y un 20,7% en Andalucía.

Agentes de la Unidad de Atención a la Familia y Mujer (UFAM) de la Policía en Almería

Los delitos contra la libertad sexual mantienen una tendencia de fuerte aumento iniciada en 2014 y el incremento es del 30% en relación a 2019 en nuestro país. Desde el Ministerio del Interior relacionan este incremento de este tipo de delitos, que según el título VIII del Código Penal pueden ser acoso, abuso, agresión sexual, exhibicionismo, pornografía infantil y prostitución, con las activas políticas de concienciación y reducción de la tolerancia social y personal que se traducen en mayor disposición de las víctimas a denunciar y poner sus casos en manos de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad reduciendo los niveles de infradenuncia que han podido y pueden existir con una tasa de esclarecimiento que se ha situado en torno al 80%. La estadística del Ministerio del Interior en Almería refleja, por ejemplo, que de los 220 hechos conocidos en 2018 se esclarecieron 192, siendo 2014 el año con menos denuncias con 33 y 2007 el de peores registros con 94 detenciones en la provincia.

Los homicidios dolosos y asesinatos consumados en la provincia han sido 8 frente a los 6 de los nueve primeros meses del año pasado, un 33,3% más, mientras que los que no se materializaron -en grado de tentativa- también suben de 17 a 21 (23%). Los delitos graves y menos graves de lesiones y riña tumultuaria crecen un 32% y los relacionados con el tráfico de drogas experimentan un leve avance de 398 a 421 (5,8%). El poderoso avance de la cibercriminalidad no se recoge el desglose provincial de infracciones penales del tercer trimestre del Ministerio del Interior, si bien a nivel nacional suponen ya el 12,5% de las infracciones penales del periodo estudiado (217.571 en España), un incremento del 89,3% sobre 2019 y un 455,5% sobre 2016. La mayoría son estafas económicas y de usurpación de identidad y en Almería en el último año fueron 2.659 delitos (2.281 por fraude informático). 

Una de las investigaciones desarrolladas por la Guardia Civil

Balance de criminalidad en municipios de más de 20.000 habitantes

La capital. Las infracciones penales crecen un 27,7% de 5.273 a 6.732. La principal subida se registra en los homicidios y asesinatos en grado de tentativa que pasaron de 2 a 7 (un 250% más), los crímenes consumados que fueron 2 frente a 1 en 2021 (100%) y también se incrementan un 58% los robos con fuerza en domicilios pasando de 181 a 286. Los hurtos aumentan un 47,6%, de 1.085 a 1.602, y las sustracciones de vehículos de 89 a 103 (15,7%). Los robos con violencia e intimidación también experimentan una subida del 10,1%, mientras que retroceden los delitos contra la libertad e indemnidad sexual casi un 20% y con especial atención a las agresiones sexuales con penetración que pasan de 9 a 4 (-55%).

Adra. Crecen las infracciones un 7%, especialmente significativo los delitos sexuales que pasan de 2 a 4 (100%) y los hurtos de 70 a 102, un 45,7% más. Caen un 20% los robos con fuerza en domicilios, establecimientos y otras instalaciones.

El Ejido. Las infracciones penales suben un 13,6% de 2.411 a 2.740 hechos. Retroceso en agresiones sexuales con penetración y los delitos de tráfico de drogas frente al crecimiento considerablemente de los robos con violencia e intimidación de 31 a 86 (177,4%).

Níjar es uno de los grandes municipios en los que la delincuencia experimenta un mayor freno con 1.109 delitos frente a los 1.170 del mismo periodo del año anterior: -5,2%. Sin embargo, las agresiones sexuales con penetración han experimentado una preocupante subida con 4 casos frente a 1 de 2021 (300%). Los hurtos crecen casi un 10%, una de las pocas tipologías delictivas que no caen.

Roquetas. Subida del 12,8% de las infracciones penales, de 3.842 a 4.334. Al igual que Níjar experimenta una preocupante incremento de agresiones sexuales con penetración de 8 a 17 (112% más), pero ve caer la estadística de homicidios y asesinatos consumados y en grado de tentativa. También cae el tráfico de drogas, pero siguen subiendo los robos con fuerza en domicilios (63%) y los robos con violencia e intimidación (36%).

Vícar. Experimenta un descenso generalizado de la delincuencia, al igual que Níjar. En los nueve primeros meses del año presenta un 6,8% menos de infracciones penales, de 970 a 904. No se ha producido en lo que va de año ningún homicidio ni asesinato, tampoco en grado de tentativa, ni secuestro. Crecen un 88% los robos con fuerza en domicilios y un 81% los robos con violencia e intimidación.