Nochevieja fue el punto de partida de una fiesta que está revolucionando Sorbas. Decenas de coches, caravanas y cientos de personas se agolpan, en plena pandemia, en en el paraje de El Hueli, una cantera de yeso abandonada hace lustros en mitad de un paraje protegido por sus espectaculares formaciones de yeso.

Las imágenes hablan por sí solas. Cientos de personas que incumplen completamente las medidas de seguridad prioritarias en una situación pandémica como la actual. Los vídeos de los vecinos muestran una explanada de varias hectáreas llena de caravanas y automóviles mientras los participantes de esta 'rave', instalada desde Nochevieja, disfrutan de la fiesta en uno de los tres escenarios que se han instalado.

La fiesta, como es lógico, carece de autorización y así lo deja claro el Ayuntamiento: "Continuamos en contacto con la Subdelegación del Gobierno, Junta de Andalucía, haciendo seguimiento de este festival que desde el Ayuntamiento no cuenta con los permisos pertinentes, esperando noticias de las acciones llevadas a cabo. Varios escritos se han vuelto a remitir en el día de hoy (2 de enero), insistiendo en la necesidad de conocer las intervenciones realizadas". 

Sin embargo, a pesar de los continuos avisos, no ha sido hasta un par de días después cuando la Guardia Civil se personó en la zona intentando disuadir una fiesta que ya se alarga durante cuatro días y se asienta en una de las zonas con mayor personalidad de la provincia, a solo 5 kilómetros del Paraje Natural Karst en Yesos de Sorbas,  con gran cantidad de galerías repletas de estalactitas y estalagmitas, y con kilómetros de galerías excavadas en la roca de yeso; y muy cerca del Río Aguas la principal corriente de agua exterior del Karst en Yesos de Sorbas.

Los vecinos no solo denuncian el ruido que viene provocando esta fiesta multitudinaria en el paraje de El Hueli, que llega hasta el mismo municipio (situado a varios kilómetros), también ponen sobre la mesa el daño que esta rave puede producir en la fauna y la flora de esta espectacular zona. 

Tal es el volumen e esta fiesta, que la Guardia Civil trabaja ya desde hace dos días en su desalojo. Fuentes de la Comandancia de Almería han informado de que la Unidad de Seguridad Ciudadana (Usecic) se encuentra en el lugar desde este domingo, así como que se ha procedido a investigar por un ilícito penal al promotor de esta fiesta, que está plenamente identificado.

Han señalado que además se está procediendo a levantar actas administrativas por cualquier tipo de irregularidad, relacionadas con las medidas contra la covid-19 o no, que los agentes encuentran a su paso.

Han aclarado que el propio domingo se comenzó a desalojar a los presentes, pero que tanto por la cantidad de asistentes, como para garantizar la seguridad y evitar posibles accidentes de tráfico, la Usecic necesita una “ventana de tiempo” para finalizar esta labor, de forma que esta tarde continuarán trabajando en este sentido.

Por su parte, el alcalde de Sorbas, José Fernández (PP), ha señalado a que se ha contactado con la Junta de Andalucía y con la Subdelegación del Gobierno. En este sentido, desde el Gobierno andaluz se ha aclarado a este periódico que la delegada del Gobierno, Maribel Sánchez Torregrosa, tiene conocimiento de lo ocurrido, si bien la Junta no tiene competencias en materia de seguridad ciudadana.

“No tienen permiso del Ayuntamiento ni se ha producido ningún tipo de comunicación. Han violentado una puerta de un terreno privado. La cantera estaba vallada, así que han forzado la puerta y han acampado por el terreno como si fuera de ellos”, dice el primer edil a Diario de Almería.

El Ayuntamiento tuvo conocimiento de lo ocurrido el propio día de Nochevieja, cuando una fuerte música comenzó a llegar al pueblo. “Seguimos cuatro días después y sigue la fiesta”, afirma, apuntando que desde anoche la música es "más suave", aunque sigue sonando.

El propietario de la cantera contactó con el Consistorio y ha indicado que el propio viernes comunicó a través del 062 lo que ocurría, si bien no fue hasta este lunes cuando presentó una denuncia en el cuartel.

El regidor señala que, de acuerdo a los comentarios que se leen en redes sociales, aunque no de forma oficial, al parecer durante los días previos se había promovido esta fiesta en dichos espacios virtuales, hasta que el propio viernes se facilitó la hora y ubicación exacta de la fiesta.

Por su parte, desde la Subdelegación del Gobierno se ha indicado a Diario de Almería que "las competencias sancionadoras en materia de espectáculos públicos y actividades recreativas no autorizadas (la rave está así considerada) corresponden a los municipios y a la comunidad autónoma, al igual que las competencias sancionadoras en materia sanitaria, sin perjuicio de la colaboración que pueda llevar a cabo la Guardia Civil con las autoridades de estas dos administraciones".

"Al hilo de las infracciones que puedan cometerse en materia de espectáculos públicos, sanitaria o de cualquier otro ámbito, se estará a las denuncias que se formulen ante las autoridades competentes por los agentes de la autoridad. Igualmente, si de las conductas se dedujera algún tipo de delito, corresponderá a los juzgados su conocimiento. Dicho lo cual, la Subdelegación ha dado a la Guardia Civil de la incidencia trasladada por el ayuntamiento", han concluido.