El heredero de ocho generaciones de pastores entre un mar de plásticos

La luz roja ya invade el cielo. Está a punto de amanecer y Juan Pedro Fuentes Fernández ya está en marcha. Se ha puesto todos sus arreos y está listo para la tarea diaria. Con paso lento pero firme se acerca a los establos donde están sus inseparables compañeras. Son muchas pero él las quiere a todas por igual. Aquí no hay favoritas.

La luz del día quiere hacerse un hueco entre la oscuridad y la luminosidad blanca, natural. Es la hora de partir. Comienza aquí un día en la vida de uno de los pastores más jóvenes del municipio de El Ejido. "Mi hermano es el más joven de todos los pastores. Tiene 15 años y hará 16 en septiembre. Es el menor, que se sepa, según la Junta de Pastores. Él lleva 700 cabezas y yo 600", explicó el pastor. No obstante él no es el más joven de todo el municipio. Por unos pocos años su hermano Francisco Ángel de apenas 16 años es el más joven de toda la comarca. Además es un pastor de los buenos. Dice Juan Pedro que conoce a cada una de las ovejas y cabras que tiene en su rebaño y que sería capaz de identificarlas entre todas. Además el bueno de Francisco Ángel sabe de qué familia es cada oveja y es que él ha nacido para ser pastor.

Se denomina pastor a la persona que se dedica a la cría y cuidado del ganado al aire libre, especialmente referido al ganado ovino, también se aplica al caprino y bovino. Esta es la definición de pastor. Pues bien, tanto Juan Pedro como Francisco Ángel cumplen al cien por cien con este perfil. No hay ni un detalle de cada uno de sus animales que se les escape, sobre todo, al benjamín de esta familia de pastores. Juan Pedro apunta que "mi hermano todavía es mejor que yo. Por las mañanas me tiene que levantar mi padre, pero él se levanta sólo y además conoce a todas. Sabe decirte cuál es su madre e incluso de la abuela". Juan Pedro va más allá y añade que lo de su hermano es un don. "Lo tiene mi padre, mi abuelo y él. Yo no lo he sacado, pero es que es capaz de reconocer a cada oveja y de quién es hija", explica. No obstante de casta le viene al galgo, ya que la familia de Juan Pedro y de Francisco Ángel llevan siendo pastores desde hace 800 años. Sus generaciones vinieron a El Ejido, donde se asentaron desde Galicia hace ya 8 siglos y desde entonces siempre se han dedicado al pastoreo. Ni que decir tiene que su padre es pastor, su abuelo es pastor y su bisabuelo también. Ellos fueron de los primeros en asentarse en una tierra llena de oportunidades como El Ejido y donde la agricultura se ha convertido en la base principal de la economía del municipio desplazando de manera importante a la ganadería. Ellos enamorados de esta profesión que ha ido pasando de generación en generación continúan desarrollándola tal y como fue cuando emprendieron el éxodo desde Galicia hasta El Ejido.

Juan Pedro indica que la tradición de su familia viene desde Galicia. "Venimos de pastores nómadas de Galicia y de todos los que hay somos los únicos que seguimos. De hecho somos de las familias natales de El Ejido, de las primeras que llegaron al municipio", indica el pastor.

Cuando oyes hablar a Juan Pedro de su profesión le envidias y te apetece acompañarle, sólo para poder hablar del pastoreo con la misma pasión y el énfasis con el que él lo hace. Escuchándole entiendes porque él va a seguir siendo pastor toda la vida.