Una llamada es el primer paso para superar la desesperanza

La necesidad de hablar y de desahogarse es el común denominador de las personas que sienten que están solas y piensan que sus problemas no son lo suficientemente importantes como para preocupar a los demás.

Cuando alguien se siente solo, deprimido, vacío, agobiado por la situación que está atravesando, hay una voz al otro lado del teléfono dispuesta a escuchar, a mostrar interés en las palabras ahogadas por la desesperación, a buscar una solución a los problemas. La escucha empática activa es uno de los remedios más eficaces a la hora de relajar a una persona en una situación de crisis.

El Teléfono de la Esperanza es el remedio a la soledad. Un total de 150 personas cualificadas y 85 voluntarios formados, con los que descargar los pesares que se acumulan en la espalda y que impiden el poder caminar erguidos y la mirada alta y segura.

Desde hace 8 años Almería cuenta con el servicio de esta ONG de acción social y cooperación al desarrollo, que ofrece una valiosa presatación a la sociedad tanto ayudando a las personas como a familias enteras que están atravesando una situación crisis.

La presidenta del Teléfono de la Esperanza, Elena García, afirma: "quien nos llama, casi siempre es porque en su entrorno cuando cuentan lo que les pasa, les responden con un 'ya estás con el mismo problema', y para ellos a lo mejor es algo que les agobia muchisimo".

Asimismo, tienen terapia presencial, "si alguien necesita más ayuda o creemos conveniente que se participe en alguno de nuestros talleres o cursos le proponemos que venga. Los grupos son reducidos, de unas diez personas. Y todo es gratuito, porque pensamos en el bienestar de todos", informa Elena García.

Los profesionales que atienden las llamadas del Teléfono de la Esperanza no se limitan a dar consejos, sino que lo que les brindan es la aceptación incondicionalde lo que sienten y ayudarles a buscar las opciones y los caminos que les vayan a ser más certeros.

"Somos conscientes de la importancia en la prevención por lo que promovemos el cuidado de la salud emocional a través de talleres, grupos de formación y autoayuda, seminarios que fomentan en las personas una relación stisfactoria con sigomismas y con las demás", según Elena estas son las prioridades.

La vida tiene diferentes etapas por las que, necesariamente, se han de pasar, unos tardan más que otros en adecuarse a la situación que les oprime para volver a sentirse bien, pero en todo pasa, todo tiene solución.