Magnífico inicio de curso en la peña El Morato
Crónicas desde la Ciudad
Carmen Carmona Lara, joven cordobesa, de Benamejí, ha sido con todo merecimiento la ganadora en el último Festival Flamenco “Melón de Oro” que se celebra en la localidad murciana de Lo Ferro
El Filón Flamenco viajó de La Unión a Almería
Recientemente una cantante de cierta fama afirmaba algo insólito: la afinación (entonación vocal) está sobrevalorada musicalmente. Frase aberrante en cualquier disciplina instrumental y, quizás, más acentuado en el ámbito flamenco al carecer este de partitura y/o director. Todo lo contrario -diría que en las antípodas de la boutade- a la afinación exquisita, al certero y dominio de los graves y agudos, silencios y melismas, obsequiados por Carmen Carmona Lara a lo largo del recital de apertura del nuevo curso reglado de El Morato.
La peña radicada en el Quemadero cumplió fielmente con su tradición de dar cabida y oportunidad escénica a jóvenes de calidad previamente contrastada y de ofrecer a socios y amigos una velada de garantía, coincidente con el reinicio de las actividades previstas en cada temporada. Y a fe que se cumplieron tales premisas con esta talentosa cordobesa de Benamejí a la que se le abre todo un esperanzador mundo artístico por explorar, crecer y hacer gozar a quienes tengan la dicha de escucharla. Caso de los asistentes el pasado viernes a la sede-cueva de El Morato; colmada, como es habitual, de aficionados veteranos o neófitos en estos gratificantes menesteres del cante, toque y baile; aunque esta última disciplina estuviera ausente. Dos sillas, una cantaora, un guitarrista... y echa vino, montañés. La noche prometía.
Tras la bienvenida de rigor, presentación y unas agradecidas palabras de la protagonista, la sonanta de Antonio de Quero comenzó a desgranar sus notas por malagueñas. Brillante, seguro y fiel a lo demandado en cada momento por la cabecera del cartel. Antonio ha alcanzado un grado de madurez capaz de abordar cada estilo de un amplio repertorio divido, como es habitual, en dos partes: malagueña del Mellizo, rondeña de Anilla la de Ronda y fandango de Yerbabuena; alegrías, tangos en memoria de Morente, tarantas evocadoras de Gabriel Moreno y Pastora (Linares y La Gabriela dándose la mano), seguiriyas y una exhaustiva tanda de fandangos en los que Paco Toronjo se hizo presente... Recital de lujo a cargo de una jovencita que parece haberse “tragado a una vieja”, por la frescura de su voz y a la vez antañona. Clásica y moderna. Dominadora del espacio una vez superados los lógicos nervios iniciales.
A Carmen la afición le viene vía materna dado que su abuelo era un enorme aficionado, al que escuchaba desde chiquitica. En vista de ello, su madre la inscribió en la academia de cante en La Puebla de Cazalla de Fernando Rodríguez, amigo y guitarrista; y seguidamente en el Conservatorio Superior de Música “Rafael Orozco”. Encantadora en el trato, ya atesora, pese a su aún corta carrera profesional varios primeros premios de prestigio:
-El de jóvenes flamencos de la Diputaciòn de Córdoba, en la modalidad “Cayetano Muriel” (Niño de Cabra).
-Cante Nacional de Torremolinos (2020)
-Peña flamenca sevillana “Torres Macarena” (2021)
-Nacional de Alcalá de Guadaíra (Sevilla, 2022)
-XX Concurso Nacional de Cante Flamenco “El Candil” (Barcelona, 2024)
-Primero de cantes de ritmo en el 44º Festival de Lo Ferro (2024)
-Y por último: “Melón de Oro” del XLV Festival de Cante de Lo Ferro (2025) y que le servirá como recomendable tarjeta de presentación (mismo galardón que años atrás conquistase la paisana Mª José Pérez).
Reconocimientos fruto de su cálida voz, del conocimiento correcto de más de treinta estilos y variantes y de su depurada técnica respiratoria, la que le permite distintas modulaciones y la ligazón natural de los tercios abordados. Sin embargo, Carmen no se duerme en los laureles (valga el tópico) y compagina sus actuaciones en peñas, centros culturales y concursos con el estudio académico. En concreto, ha cursado la carrera de Relaciones Laborales y Recursos Humanos, a falta de presentar el TFG (trabajo de fin de grado) titulado “El estatuto del artista y su protección”; tema prácticamente inédito y de gran interés social. Unido ello, que no es poco, le auguramos un espléndido futuro en el competitivo flamenco declarado Bien de Interés Cultural Inmaterial de la Humanidad.
Felicidades, salud y suerte.
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