Multan al abogado que denunció abusos en los juzgados de Vera

Juan Perán, que relató un trato “vejatorio” de guardias civiles junto a su esposa, recurre ahora una sanción de 601 euros impuesta por la Subdelegación del Gobierno

Un abogado denuncia los abusos sufridos junto a su mujer a manos de los guardias civiles de los juzgados veratenses

Juzgados de Vera. / Efe

El abogado Juan Perán, que el pasado febrero denunció públicamente los presuntos abusos sufridos junto a su esposa en los accesos a los juzgados de Vera, ha recibido ahora una multa de 601 euros por una infracción grave de la Ley de Seguridad Ciudadana.

La resolución de la Subdelegación del Gobierno en Almería, a la que ha tenido acceso este periódico, atribuye al letrado haber causado “desorden público” el 6 de febrero al mostrarse “muy agitado, con actitud agresiva y hostil” con los guardias civiles y con el personal judicial, negándose a abandonar las instalaciones y gritando expresiones como “no sois humanos”.

Según el documento oficial, la conducta descrita constituye una infracción grave del artículo 36.3 de la conocida como Ley Mordaza, sancionada con el pago de 601 euros. El expediente se ha resuelto al no presentarse alegaciones en plazo, aunque el abogado sostiene que ha interpuesto recurso de alzada ante el Ministerio del Interior.

En declaraciones remitidas a este medio, Perán considera la sanción un “nuevo abuso” y afirma que supone una revictimización después de lo que él y su esposa vivieron aquel día. “Encima de todo lo soportado, ahora me multan. Es un despropósito que he recurrido y que no pienso consentir”, asegura.

El caso estalló en febrero, cuando Perán denunció que él y su mujer fueron víctimas de un trato humillante y vejatorio por parte de los agentes encargados de controlar el acceso al edificio judicial. Según su versión, su esposa llegó a sufrir síntomas de lipotimia tras dos horas esperando a la intemperie sin que se les permitiera entrar a realizar un trámite en el Registro Civil.

Perán insistió entonces en que se trataba de un problema estructural en el acceso a los juzgados de Vera, con colas, rigidez en la gestión de citas y actitudes que calificó de “abusivas y prepotentes” por parte de los guardias. Ahora, con esta sanción, asegura que el episodio se agrava y trasciende de lo personal a lo institucional.

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