Una noche de apuestas, alcohol y una mentira que encendió El Ejido

Ni atraco, ni paliza, ni robo. La historia que agitó a El Ejido durante días no fue más que una mentira contada para esconder una noche de juego, alcohol y descontrol. La Policía Nacional ha desmentido de forma tajante el supuesto robo con violencia en las inmediaciones del mercado ejidense, que se viralizó y provocó incluso llamadas vecinales a organizar patrullas ciudadanas.

El autor de la denuncia aseguró que, en la madrugada del 9 de mayo, fue golpeado por la espalda y cayó inconsciente al suelo, despertando ya en el Hospital Universitario de Poniente sin cartera ni móvil. Una escena dramática que compartieron familiares a través de redes sociales y que medios locales amplificaron sin verificar con la Policía. Resultado: histeria colectiva y miedo en las calles.

Pero bastó revisar las cámaras de vigilancia para que la historia se derrumbara. Las imágenes revelaron que el hombre perdió el equilibrio solo —sin agresor alguno— y cayó al suelo. La cartera, lejos de ser sustraída, fue recogida del suelo por su propia mujer. No hubo ataque, ni ladrones, ni robo.

Tras ser confrontado con las pruebas, el denunciante volvió a comisaría para confesar la verdad: estaba borracho y había pasado la noche en un local de apuestas. Mintió para encubrirlo. Pidió disculpas, pero el daño ya estaba hecho.

La Policía lamenta que muchos de los medios y perfiles que se hicieron eco del bulo inicial aún no hayan rectificado públicamente, pese a conocerse ya la versión verificada de los hechos.

El caso ha sido remitido al Decanato de los Juzgados de Instrucción de El Ejido, mientras la comisaría recuerda que informaciones sin contrastar pueden alimentar alarmas sociales innecesarias y causar un impacto real en la convivencia ciudadana.