El padre de una dirigente del PSOE, investigado por contrabando de tabaco en Roquetas

El Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) ha confirmado que la Sección Civil y de Instrucción del Tribunal de Instancia número 2 de Roquetas de Mar mantiene abierta una investigación por un presunto delito de contrabando de tabaco que implica como principal sospechoso a A.M.B., padre de Anabel Mateos, actual adjunta a la Secretaría de Organización del PSOE.

Los hechos se remontan al pasado mes de enero, cuando se produjo una entrada y registro judicial en un domicilio de Roquetas de Mar donde los agentes del Servicio de Vigilancia Aduanera descubrieron un taller clandestino de fabricación y empaquetado de cigarrillos ilegales. En la operación fueron intervenidos 2.400 kilos de picadura de tabaco y 360 cajetillas falsificadas de distintas marcas, todo ello sin precintos fiscales ni controles sanitarios.

Según el TSJA, A.M.B. no llegó a pasar a disposición judicial tras el operativo, por lo que aún no ha prestado declaración formal, al igual que otros dos sospechosos que también figuran en la causa. El Juzgado ha estado a la espera del informe pericial sobre las sustancias intervenidas —que ya ha sido incorporado al procedimiento— y sigue pendiente del volcado de los teléfonos móviles incautados, cuya información aún no ha sido remitida.

Un taller clandestino insalubre dentro de una vivienda

Tal como informó Diario de Almería, la intervención judicial fue resultado de una investigación de más de seis meses por parte del equipo de Vigilancia Aduanera, que había detectado movimientos irregulares en un dúplex propiedad de la hija del principal sospechoso. El domicilio servía como punto de recepción, elaboración y distribución de tabaco ilegal.

En el registro, los agentes encontraron una instalación industrial oculta: molinos para picar hoja de tabaco, máquinas para entubar cigarrillos y equipos para empaquetar cajetillas, muchas de ellas falsificadas con logotipos de marcas comerciales.

La mercancía intervenida fue valorada en más de 384.000 euros, superando ampliamente el límite legal que tipifica el contrabando como delito penal (15.000 euros). Parte del tabaco crudo ya había sido interceptado en una operación previa, en diciembre de 2024, cuando se incautaron 1.200 kilos procedentes de Cartagena con destino a este taller clandestino.

El informe toxicológico elaborado por el laboratorio del Servicio de Vigilancia Aduanera en Madrid confirmó que la picadura incautada contenía sustancias nocivas y excrementos de insectos, lo que llevó a imputar también un delito contra la salud pública.

Distribución local y red de reparto

La distribución del tabaco se realizaba mediante vehículos particulares y furgonetas de alquiler, con envíos principalmente en Roquetas de Mar y el Poniente almeriense. Los pedidos se gestionaban a través de redes sociales y mensajería instantánea, sin intermediarios ni canales legales.

Se trata, según confirmaron fuentes de la investigación, de la primera operación de este tipo en Almería que consigue desmantelar un centro completo de fabricación ilegal de cigarrillos, desde la picadura hasta el empaquetado final.