Las primeras medusas se acercan hasta las playas de Cabo de Gata

La sobrepesca, el aumento de temperatura del mar o la contaminación son algunos de los principales motivos que barajan los expertos ante la llegada de las primeras plagas de medusas hasta las playas del litoral almeriense. En concreto, la playa de 'La Fabriquilla' situada en el Cabo de Gata ha sido el lugar elegido por estos incómodos compañeros de baño.

No obstante, la delegación de Salud almeriense ha informado de que no se han registrado incidencias por la picadura de estos organismos marinos a lo largo del fin de semana. La especie que ha visitado nuestra costa ha sido la Aurelia aurita (medusa común) además de especies más peligrosas como la Carabela Portuguesa. Esta última ya ha aparecido en la costa de Cabo de Gata en varias temporadas, y su forma es como un pequeño cojín, de entre 20 y 25 centímetros, de color rosado, cuyos más de cuarenta tentáculos están repletos de células urticantes. Sus picaduras son mucho más dolorosas y peligrosas para el bañista que las de las medusas convencionales, aunque la ventaja para el hombre es que resultan fáciles de ver mientras navegan por la superficie del mar, como un flotador.

La picadura puede llegar a ser mortal en el caso de que las víctimas sean grupos de riesgo, tales como personas con problemas asmáticos, cardiovasculares, neurológicos, etc. En los últimos años, los avistamientos de carabelas portuguesas son más habituales en el Mediterráneo por las condiciones climáticas que implican años más secos y que propician que las aguas del mar abierto lleguen a las costas y se mezclen más fácilmente. El Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) insiste en que ante el contacto con una medusa común el vinagre hace que los aguijones dejen de inyectar veneno. Se han salvado muchas vidas hasta para picaduras de especímenes australianos.

No se debe frotar la zona afectada con arena ni con la toalla, ni limpiar con agua dulce, simplemente usar agua salada. Aplicar frío sobre la zona afectada durante 15 minutos usando una bolsa de plástico que contenga hielo alivia la picadura, aunque si el dolor persiste conviene aplicar una bolsa de hielo durante otros 15 minutos además de extraer cualquier resto de tentáculo.