Un trabajador 24 horas que cambió el coche por la retroexcavadora Rafael García Sola (IU)

Es un trabajador infatigable, con más de treinta años de profesión como maestro a sus espaldas y se pasa el día en la carretera porque su verdadera vocación es la de ser alcalde sin percibir ni un euro a cambio. Rafael García Sola acaba de iniciar su tercera legislatura en la Alcaldía de Velefique y tiene la intención de dedicarse, en 2013 cuando se jubile, plenamente a la labor que ahora compagina. El que fuera fundador del PSOE en el municipio, antes de partir a trabajar en Cataluña, tiene un servicio 24 horas. Es alcalde desde 2003 con Izquierda Unida, una agrupación que puso en marcha con un grupo de amigos para trabajar por el pueblo. "Ni siquiera tenemos policía. El alcalde lo es todo, todos los problemas para mí", argumenta con cierta resignación, pero con el entusiasmo de alguien que destinó a una máquina retroexcavadora la subvención que recibió para que el consistorio tuviera un vehículo oficial porque sería más útil para las necesidades del municipio. Baja los miércoles por la tarde, algunos viernes y cada fin de s emana a un pueblo con 315 habitantes y, de momento, sin problemas en su financiación. Sólo perciben 15 euros por asistir a plenos, cantidad simbólica que se deja al estar en la carretera casi a diario. "No puede ser que estemos en política para servirnos. Algunos no se dan cuenta de que administran un dinero que no es nuestro. Las personas que estamos en uno y otro partido sin cobrar, a veces hasta perdiendo dinero, somos los políticos con vocación de servicio público", argumenta Rafael García.