De 'El secreto de la Piedra de Ronda' a un libro de la historia de Carboneras
Francisco Hernández ha lanzado hace 20 días su primera novela que le ha permitido revivir experiencias y reencontrarse por casualidad con su protagonista En junio publica nueva obra
Francisco Hernández Benzal, profesor de secundaria en el Instituto de Educación Secundaria Juan Goytisolo de Carboneras, ha escrito su primera novela El secreto de la piedra de Ronda, pero ésta no será la única inmersión en el mundo de las letras, ya que en edición tiene un nuevo libro sobre la historia de su pueblo, una obra que se titulará Carboneras. Un recorrido por su historia, que con suerte verá la luz el próximo mes de junio.
Hace apenas 20 días que Hernández Benzal publicó su primera novela, editada por la Editorial Circulo Rojo. En este tiempo ya ha vendido la primera edición de este libro, que como explica su autor se estructura en tres partes diferenciadas. "La primera para justificar qué es y qué puede significar la piedra. La segunda, la propia experiencia hipnótica con aquel alumno. La tercera es la búsqueda de ese talismán", aclara.
Con motivo del Día del Libro, este carbonero realizó una presentación de su obra en la libre ría Picasso, donde conversó con Diario de Almería. En dicho encuentro hizo un balance positivo de su incursión en la literatura, una experiencia que describió con una simple y sencilla palabra: "Emoción".
Y es que Francisco Hernández asegura que en este corto periodo de tiempo ha vivido una experiencia personal emocionante, que le ha llevado, por casualidades de la vida, a reencontrarse con el personaje principal de la trama de su libro, Santiago.
Hacía 37 años que Francisco y Santiago no sabían nada el uno del otro. Es más un océano, el Atlántico, les separaba (Santiago vive en México). Pero aquel joven de 14 años al que Hernández sometió a una experiencia de hipnosis en un viaje de estudios en el famoso Vicente Puchol con rumbo a Melilla contactó con su antiguo profesor al conocer que narraba su experiencia en el Secreto de la piedra de Ronda.
"La experiencia de reencontrarme con los personajes y familiares de los protagonistas de mi historia es lo más destacable", resalta el escritor. "Este hecho -añade- ha posibilitado revivir las emociones y vivencias de la juventud y comprobar que las experiencias vividas y relatadas por mí también lo fueron para los que la compartieron hace tantos años conmigo".
Además, recuerda: "Una chica, Caridad, sin ella saberlo, en un encuentro personal para comentar el libro, me trasladó hasta el lugar de los hechos y a conectar directamente con los personajes", recuerda.
Hoy Francisco Hernández presenta El secreto de la piedra de Ronda es un escenario que no le es ajeno, su centro de trabajo. La presentación va a servir como colofón a las actividades que el instituto ha realizado con motivo del Día del Libro y, según señala, "como agradecimiento a la totalidad de mis compañeros que tan bien han acogido esta primicia literaria personal".
En las próximas semanas, el autor de El Secreto de la piedra de Ronda seguirá presentando su libro. Pero también estará pendiente de que se cumplan los plazos para ver editada su segunda obra titulada Carboneras. Un recorrido por su historia, que comenzó a escribir en 2004.
Según explica Hernández Benzal en este libro intenta transmitir a los carboneros y a los interesados en este municipio el esfuerzo de los hombres y mujeres a lo largo de sus más de 500 años de historia. "Como maestro que soy, al hacer el recorrido patrimonial, descubro y describo cada pedazo de nuestra historia y propongo a nuestros gobernantes ideas y sugerencia de cómo poner en valor cada uno de nuestros monumentos patrimoniales".
"Pero no olvido las principales tareas de nuestros primeros habitantes: la pesca, la agricultura, la minería, el esparto… en definitiva, la industria. Una industria que hoy es un puntal provincial y que tuvo sus orígenes hace más de cinco siglos", concluye.
Con la publicación de estos dos libros comienza un nuevo camino para este profesor de secundaria que abandona este año la docencia con miras a la escritura. "Ahora quiero transmitir a mis hijos y a los demás unas experiencias que han formado parte de mi vida y que me han servido para vivir, y también para caminar dignamente como persona, padre, esposo y maestro".
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