A pocas semanas de que el PP cumpla cuatro años en el Gobierno de la Junta de Andalucía, aunque en dos legislaturas por el adelanto electoral del pasado junio, la consejera de Economía, Hacienda y Fondos Europeos, Carolina España, reivindicó que, en ese escaso lapso temporal, “Andalucía ya no es la que dejaron los socialistas”, sino que es una comunidad autónoma que “está cambiando, que crece y avanza”. 

España, quien se incorporó al Ejecutivo del presidente Juanma Moreno en esta legislatura, trazó un optimista retrato de cómo está la comunidad autónoma durante su participación este miércoles en una nueva edición el Foro Joly Andalucía, patrocinado en esta ocasión por Telefónica. Andalucía, resumió, es una tierra que quiere ser líder entre las regiones de España, “la mejor para invertir, porque ya era la mejor para vivir”. 

En un discurso muy político pero plagado de datos económicos y referencias a las políticas que los generan, España defendió que medidas como las bajadas de impuestos, la simplificación administrativa y el incremento del gasto social –en sanidad, educación y dependencia– están protagonizando ese cambio que, sostuvo, “beneficia a las familias y a las empresas” que viven y están radicadas en Andalucía.

Al presentar a la ponente, la atención y el cuidado a esos dos pilares sociales de Andalucía también habían sido destacadas minutos antes por Fátima Báñez, la ex ministra de Empleo y presidenta de la Fundación CEOE, como señas de identidad de la nueva forma de gobernar Andalucía que ha traído el partido en el que ella y España militan.

España enfatizó que la labor del Gobierno andaluz y, singularmente, de la de la Consejería que dirige, está siendo "dotar a las provincias andaluzas de la solvencia y del empuje suficientes para que puedan mantener una senda positiva de crecimiento, generando empleo y atrayendo riqueza”.

Como principal instrumento para lograr ese objetivo, la consejera destacó el proyecto de Presupuestos de la Junta que está a punto de aprobarse en el Parlamento de Andalucía, dada la mayoría absoluta con la que cuenta el PP. “Hemos planteado unos presupuestos para Andalucía ambiciosos, valientes y comprometidos con nuestra sociedad”, los definió Carolina España.

Según su visión, han planteado unas cuentas generales que sean fiables, útiles y que favorezcan a los andaluces en cualquiera de los posibles escenarios a los que nos enfrentaremos en un contexto internacional de incertidumbre, con una crisis inflacionaria, una guerra en Europa y los coletazos económicos y sociales que aún se desprenden de la pandemia. “Son 45.603 millones de euros, un 12,9% más que los últimos presupuestos aprobados”, recordó España antes de proclamar: “Son los presupuestos más sociales de la historia y los que cuentan con menos impuestos”.

Así, la consejera detalló que el Presupuesto que se va a aprobar cuenta con el mayor gasto social de la historia: 27.700 millones de euros, que representan más del 60% del total. “Y apuestan sin precedentes por medidas de apoyo al tejido productivo, con más de 6.000 millones de euros”.

En resumen, España afirmó que las cuentas andaluzas para 2023 profundizan en la apuesta del Ejecutivo autonómico “por la estabilidad económica” como generador de “un espacio de garantías” para poder cumplir sus dos objetivos fundamentales: “Mantener el estado de bienestar y, al mismo tiempo, impulsar la creación de riqueza y de empleo”. 

Pero estas apuestas para el año próximo no las considera un hecho aislado sino la continuación de un trabajo hecho en la anterior legislatura. 

“Desde hace cuatro años, hablar de Andalucía es hablar en positivo”, dijo España, porque sostuvo que la comunidad “está mejor. Es más fuerte. Es más competitiva”. 

Una ejecución que, según dijo, se empieza a imitar y a reconocer en otros territorios de España. Así enfatizo que recientemente el presidente socialista de Aragón, Javier Lambán, había dicho que “Andalucía iba a ser la comunidad líder de España”. 

La titular de Economía incluso se atrevió a señalar que Andalucía ha dejado “el vagón de cola para situarse entre las primeras comunidades de España, hasta el punto de crecer por encima de la media demostrando ser un gobierno serio, riguroso, que contiene la deuda y que invierte en lo que realmente hace falta”.

Fue entonces cuanto España dijo que “Andalucía ya no es de la que dejaron los socialistas, ya no es ya un territorio en desventaja fiscal con respecto a otras regiones de nuestro país”. Ahora es la segunda comunidad autónoma con menor presión fiscal de España, cuando antes era, sostuvo, la cuarta que más impuestos pagaba. “Esto la convierte en una región ideal para la inversión y la captación de fondos internacionales”, afirmó.

Tras seis rebajas fiscales ejecutadas desde que la Junta la preside Moreno, España resaltó la importancia de la última, aprobada el pasado mes de septiembre, que supuso la eliminación por un año del canon del agua –que aligerará la factura de todos los andaluces–, se ha deflactado el IRPF y se han incrementado los mínimos personales y familiares en ese mismo impuesto.

Y recordó que la propuesta estrella de esa rebaja fiscal es el cumplimiento electoral de una promesa de Juanma Moreno: la supresión del Impuesto de Patrimonio, que se ha bonificado al 100% “porque lastraba la llegada de inversiones y rentas altas, un impuesto sin sentido en la actualidad que no se aplica en ningún otro país de la Unión Europea”.

La representante del Gobierno andaluz remarcó el discurso oficial de que bajar impuestos no está restando recaudación. “A pesar de estas seis bajadas de impuestos que han dejado más de 900 millones en manos de los andaluces”, dijo, “en Andalucía han aumentado nuestros contribuyentes en base al IRPF nada más y nada menos que en 400.000 más entre 2018 y 2021. Esto supone un aumento del 11% en número de contribuyentes y un 23,4% más en recaudación por IRPF”.

Durante el coloquio, además, refutó la crítica del Observatorio Económico de Andalucía que sostiene lo contrario, que no se recauda más.

Ante la pregunta al respecto que le planteó el director general de Contenidos de Grupo Joly y director de Diario de Sevilla, David Fernández, España dijo que lo que el Observatorio ha destacado es que se recaudó menos en todos los impuestos menos en IRPF, pero si leen bien su informe, entre líneas se reconoce que sí crece “lo más importante” que es este impuesto.

A la bajada de impuestos atribuye también que haya crecido la inversión extranjera hasta alcanzar datos récord, con un incremento del 87,1% con respecto al trienio inmediatamente anterior (2016-2018), mientras en España caía un 28,6%. “Hemos alcanzado la cifra récord de 2.608 millones de euros”, enfatizó.

Para sustentar su afirmación de que Andalucía está cambiando, porque ahora crece y avanza, España resaltó que desde 2019, el PIB andaluz se comporta mejor que el de España, la comunidad ha alcanzado el máximo de personas ocupadas: 3.280.600. También que es líderes en la creación de autónomos, una vitola que se la he arrebatado a Cataluña.