El Almería recibirá al Mallorca tras acumular una vuelta entera sin ganar

Nunca antes en la historia de la UD Almería el equipo había acumulado una vuelta entera sin conocer la victoria. El peor registro con anterioridad databa de la temporada 2003-2004, el segundo año en Segunda tras aterrizar en la LFP de la mano de Casuco en el banquillo. Precisamente con el técnico lorquino arrancó la mala racha de aquella etapa con un empate (0-0) en Terrasa. Tras acumular diez jornadas sin ganar el preparador murciano era destituido por Alfonso García, recién llegado a la propiedad del club tras comprar el paquete accionarial de Guillermo Blanes.

Su sustituto interino, Alfonsín, arrancó un empate en la visita al Málaga B (2-2) antes de cederle el testigo a Luis Ángel Duque (el del famoso "tiro en la p..."), que estuvo todavía siete jornadas sin sumar los 3 puntos, hasta romper el maleficio un 20 de marzo de 2004 goleando en el Estadio de los Juegos Mediterráneos a Las Palmas (3-0). 17 jornadas sin ganar se habían acumulado y la UDA establecía entonces su particular récord negativo, superado esta temporada. Duque, por cierto, era destituido dos jornadas después y sería Alfonsín quien salvase de la quema el proyecto entonces megalómano del empresario murciano.

Parecía difícil batir aquellos números nefastos, pero nunca es tarde para ir a peor cuando de la UDA se trata. Tanto es así que el equipo ha firmado por primera vez en su ya casi cuarto de siglo de historia la peor racha sin ganar que se recuerda, nada menos que 19 jornadas seguidas, lo que equivale a una vuelta entera de la competición. No lo ha hecho en una misma campaña, sino sumando las 16 jornadas que acumula en la actualidad sin llevarse a la boca los 3 puntos de una tacada con las 3 que ya estuvo al final del curso pasado para terminar salvándose de forma agónica con un 3-3 en Cornellá ante un ya descendido Espanyol.

Paradójicamente la última victoria liguera de los rojiblancos se remonta al pasado 20 de mayo. Se disputaba la jornada 35ª con la permanencia en juego y los almerienses recibían en casa la visita del Real Mallorca, el mismo rival que el próximo domingo puede cavar su fosa en el camino a Segunda o suponer un rayo de esperanza en caso de romper el maleficio.

Rubi alineó a un once que siete meses después no distará en mucho al que ponga en liza Garitano porque solo tres jugadores han salido de aquel equipo, que contó con Fernando bajo palos, Pozo, Centelles, Ely y Babic en defensa, Samu Costa, Robertone y Melero en el centro del campo y Lázaro, Embarba y Luis Suárez en la delantera. Ely, Babic y Samu han sido sustituidos por Édgar, Montes y Lopy, el resto de integrantes continúan, pero el equipo ha perdido parte de su alma con el cambio.

El protagonista inesperado fue Lázaro Vinicius, autor de su primer y único hat-trick con la elástica rojiblanca. A los 12 minutos de juego el extremo brasileño perforaba por primera vez la meta defendida por el serbio Rajkovic y antes del descanso anotaba el 2-0. El triplete lo completaba en el minuto 58' antes de marcharse ovacionado por la parroquia indálica a los 74 minutos de juego. Al término del encuentro, Lázaro posó sonriente con el balón del partido en la mano derecha, que luego firmarían todos los compañeros como recuerdo de la proeza, y levantando tres dedos de la izquierda en señal de sus tres tantos como figura en la imagen que ilustra esta información.

Este domingo a partir de las 14:00 se antoja un todo o nada ante el conjunto balear. Un hipotético triunfo, aparte de romper la dinámica actual, serviría como acicate para acabar el año con mejor sabor de boca e intentar acudir al mercado invernal para reforzar determinadas posiciones creyendo en que la permanencia aún sería posible. Una nueva derrota, en cambio, provocaría que la lectura interna de la situación por parte de la dirección deportiva estuviera más enfocada a emplear la ventana de enero para soltar lastre y traer ya refuerzos con vistas a la campaña venidera en Segunda.