El Almería hizo una importante inversión el pasado verano por diferentes futbolistas. Destacaron operaciones como los siete millones de euros abonados al Santos por Kaiky Fernandes, un central que por entonces tenía la mayoría de edad recién cumplida; los siete para hacerse con Lázaro Vinicius, sin experiencia en el viejo continente; o los tres y medio para adquirir a Milovanovic (variables aportes), quien no ha destacado ni en el quinto escalafón del fútbol español. Ninguno de ellos ha terminado por tener un rendimiento reseñable, optando Rubi por futbolistas con más experiencia, caso de Baptistao o Embarba.

La victoria ante el Rayo Vallecano en la octava jornada del campeonato fue un punto de inflexión en el desarrollo de la temporada rojiblanca. El Almería cosechaba cuatro derrotas consecutivas, lo que le había metido en puestos de descenso. El conjunto de Rubi mostró entonces una gran personalidad, sin temblarle las piernas para dominar desde el principio y marcharse al descanso con tres goles de diferencia (3-0).

En esa foto inicial ante los madrileños hubo hasta media docena de modificaciones respecto a los que posaron en San Mamés en uno de los peores partidos del curso (4-0): De la Hoz, Melero, Baptistao, Embarba y El Bilal Touré. Todos ellos no estaban teniendo el protagonismo deseado y todos han terminado por asentarse en el conjunto de Rubi. De los cinco, Melero, Embarba y Baptistao ya tenían experiencia en la categoría, mientras que el cántabro contaba con numerosos encuentros a su espalda a sus 30 años a pesar de no haber debutado en Primera División hasta la presente campaña.

La portería es la única posición en la que Rubi se la jugó más al anteponer a Fernando por delante de la experiencia de Pacheco en la élite, apuesta que posteriormente le salió a pedir de boca visto el rendimiento del murciano más allá de errores puntuales como el cometido en el encuentro reciente ante el Athletic. La zaga ha sido construida en base a Ely, el único con experiencia en la máxima categoría, más allá de apariciones eventuales de Pozo y Akieme con el Sevilla y Rayo, respectivamente. Kaiky, el más imberbe, comenzó la liga con protagonismo para posteriormente pasar a un tercer plano.

En la sala de máquinas ha sido fundamental la presencia de Melero, notándose negativamente cuando no ha podido actuar al encontrarse en la enfermería. Aunque jugadores como Robertone han dado un paso adelante aumentando su valor de mercado, algunas rachas negativas de resultados coinciden con la ausencia del ex del Levante, asistido en las bandas por futbolistas como Baptistao o Embarba, quienes la han ganado la partida a otros como Ramazani o Lázaro Vinicius.

Baptistao se ha convertido, además, en el segundo máximo goleador del equipo, con cinco dianas, apenas una menos que El Bilal Touré. El brasileño ha mostrado también una gran polivalencia, jugando por las dos bandas, incluso como acompañante de Luis Suárez tras la lesión del maliense. Si Embarba ha sido pieza clave en las acciones a balón parado, en las que la UDA ha sacado bastante rédito, no se entiende ahora un Almería sin el ariete colombiano, que aterrizó en el mercado invernal.

Así, si Rubi termina por ampliar su vínculo contractual con la entidad rojiblanca, el cual expira a finales de junio, en la planificación para la próxima temporada tendrá un papel capital la presencia de jugadores con experiencia en la categoría. Eso sí, la dirección deportiva está deseando materializar la permanencia para que jugadores como Lázaro Vinicius tengan mayor protagonismo y empiecen a justificar la fuerte inversión realizada el pasado estío por melones por abrir.