El Ayuntamiento de Almería se ha puesto manos a la obra para edificar un Centro Deportivo de Gimnasia, debido a la creciente demanda de un deporte que ha pasado de ser una asignatura escolar a convertirse en uno de los deportes más exitosos del panorama español y, por supuesto, almeriense también.

Son muchas las escuelas y los clubes deportivos de la provincia que van sumando títulos, pero la semana pasada brilló con luz propia el Club Deportivo Stella Maris. El conjunto capitalino acaba de proclamarse sexto en el Campeonato de España, el mejor resultado almeriense de la historia, tan sólo superado por una de las cunas de la gimnasia nacional, Cataluña, y Valencia. Ningún equipo de la Comunidad de Madrid, otro de los puntos de grandes gimnastas, pudo con el Stella Maris, que por supuesto fue el mejor andaluz. Celia García y Ángela Montero fueron las medallistas del club.

Blanca Barreras, Elena Zaldívar, Ana González y Elisa Vázquez son las monitoras del club, con Alex, David y Thorsten para la escuela. Tienen a su cargo un total de doscientas diez niñas en la escuela, de las cuales veinticinco son del club y compiten federadas. El crecimiento de la entidad no tiene parangón, están codeándose con la élite de la gimnasia española, con Irene Hernández, Marta Acevedo y Mónica Gómez como mejores exponentes. Las tres compiten en vía olímpica, categoría máxima de la Federación Española.

Marcados, con el conjunto almeriense en sexta posición.

“Todavía no están en la selección, son el CDS y la seleccionadora los que tienen que decidir si pasan. De momento siguen entrenando con nosotros. Estamos caminos de prepararlas para que más pronto que tarde llegen a la selección”, asegura Blanca Barreras, entrenadora nacional, que tiene claro que la temporada que viene van a tener más gimnastas llamando a las puertas de la selección: “El año que viene vamos a preparar más vías olímpicas, tenemos varias niñas que apuntan muy buenas maneras”.

De esta manera, se hace necesario el Centro Deportivo de Gimnasia. El Stella Maris, como otros clubes de la capital, entrenan en el Palacio de los Juegos Mediterráneos, una instalación angular en el 2005, pero ahora muy demandada y con el problema de no tener un suelo oficial, según explica Blanca: “Necesitamos que se den prisa, estamos entrenando en un suelo prefabricado. Tenemos niñas que tienen un gran nivel y nosotros estamos entrenando con un suelo que ni da las medidas. Vamos a llegar a un punto en el que no podemos seguir, principalmente porque existe riesgo de lesión para nuestras deportistas”.

Ángela Montero, en pleno ejercicio.

Curiosamente, el mejor resultado esta temporada ha sido en suelo, una de las cuatro especialidades que forman la gimnasia artística femenina [barras asimétricas, barra de equilibrio, suelo y salto de potro]. “Buscamos trabajar todos los ejercicios por igual, que nuestras gimnastas estén compensadas, pero este año se nos ha dado muy bien el suelo y eso que el nuestro no tiene las medidas oficiales. El año pasado destacamos en asimétricas [Mónica Mendy fue la medallista] el aparato más complicado y técnico”, apunta Blanca Barreras, orgullosa del gran trabajo de su equipo, que no descuidan ni los entrenamientos ni los estudios: “Se administran bien su tiempo. Les exigimos que tengan buenos resultados en el colegio, es compaginable el colegio y el instituto con el deporte”, finaliza la entrenadora, deseosa que una de sus tres olímpicas sean capaces de disputar unos Juegos Olímpicos.