A fuerza de aguantar el temporal en fase defensiva, el Almería logró mantener un engañoso 0-0 al descanso ante un Osasuna que salió a morder desde el principio en busca de plaza europea y de satisfacer a su parroquia tras el subcampeonato copero. Con Chumi aquejado de molestias musculares en el último entrenamiento de la semana, Rubi optó por Pozo para tapar el costado diestro y por esa banda volcó la ofensiva Jagoba Arrasate a través de un incisivo Abde, muy eficaz en el desborde.

Los rojiblancos evidenciaron las habituales carencias en la salida de balón, con Melero intentando ejercer ese rol al trote y muy lejos del área, que es su zona de influencia como buen llegador. Ante tal panorama, apenas quedó el pundonor de Luis Suárez para presionar por su cuenta y riesgo en busca de algún fallo de la zaga contraria. Volvió a echarse en falta mayor protagonismo de Robertone, que en los duelos a domicilio aparece menos de lo deseado, mientras De la Hoz tampoco ayudaba en la construcción.

El resultado fue un Almería en bloque medio-bajo al que le costaba horrores pisar el área contraria y no sufrió más de la cuenta en la retaguardia porque Osasuna pecó en numerosas ocasiones de centrar balones erráticamente al corazón del área, donde Ely y Babic son especialistas al despeje. Con todo, a los 10 minutos de juego Abde desbordó a Pozo por su banda y el pase atrás lo cortaba Fernando metiendo el pie. 

El primer acercamiento rojiblanco llegaba a la media hora de juego con un centro envenenado de Embarba que paraba Aitor Fernández. Acto seguido se producían un par de acometidas locales con centro raso de Abde al que no llega a rematar Manu Sánchez y otro de Rubén Peña que sacaba la defensa cuando Budimir se disponía a rematar dentro del área pequeña.

El ariete croata tuvo al poco la más clara con un disparo con la zurda tras un nuevo servicio lateral que Fernando despejaba de forma providencial metiendo nuevamente un pie salvador. Antes de concluir el primer periodo Luis Suárez probaba fortuna con un disparo desde fuera del área que se le marchaba alto al cafetero. 

Fernando salva una peligrosa acometida de Abde en el primer tiempo

Irse 0-0 al descanso fue un espejismo del que los indálicos iban a salir con dos golpes consecutivos justo tras la reanudación, reiniciando el duelo con una pasividad pasmosa, en un estado contemplativo impropio de quien está jugándose una salvación. En una acción nacida en el carril zurdo osasunista, Oroz recibía en zona media sin presión ninguna y filtraba un gran pase al espacio entre Babic y Centelles que Budimir supo penalizar con un toque preciso de zurda para salvar la salida a la desesperada de Fernando. 

El mazazo encajado desarboló a los almerienses, que apenas dos minutos después encajaban el 2-0 por medio de Abde. El marroquí recibió al borde del área sin oposición y se perfiló para golpear con el interior de su pierna diestra para poner el balón en la escuadra, en una zona estéril para la estirada de Fernando. Era el sexagésimo gol en contra del curso.

El atisbo de reacción se produjo con un buen centro de Embarba desde la izquierda cabeceado por Baptistao y repelido por Aitor Fernández en una buena parada que evitó que los de Rubi se acercasen en el marcador. El preparador catalán no movió el banquillo hasta el minuto 67 con un triple cambio en el que retiró a Melero, Baptistao y Embarba para dar entrada a Portillo, Puigmal y Lázaro. Unos minutos después Osasuna pudo sentenciar si la falta directa lanzada por Oroz en busca del 3-0 no hubiera sido repelida por el poste.

Lo peor, con todo, fue volver a observar que a poco que el Almería buscó el ataque estuvo muy cerca del gol. Lo mereció Luis Suárez a los 74 minutos de juego, pero el remate del colombiano tras un buen pase de Robertone lo frenaba Aitor bajo palos. Y como el 2-1 no llegaba, cayó el 3-0 con la firma de Moi Gómez, que se coló entre Pozo y Ely para recibir otro pase de Oroz y ponerla al palo contrario de Fernando. Ya en el descuento, Lázaro Vinicius anotaba el tanto de la honra con disparo desde la frontal a pase de Suárez.

A expensas de lo que hagan Valladolid, Getafe, Valencia y Espanyol, este bisoño Almería (jugándose la vida no vio ni una sola cartulina amarilla) se mantiene con 36 puntos en la tabla y lo fía todo a las visitas de Real Mallorca y Real Valladolid al Power Horse Stadium, teniendo en cuenta que la próxima salida será a San Sebastián con Europa en juego para la Real al igual que hoy en Pamplona. La angustia está servida hasta el final.