Toda una carrera a 550 kilómetros

Lleva once años ya en Madrid y ha desarrollado ya una extensa carrera en diferentes clubes de voleibol, deporte que empezó a practicar en Almería con catorce años en el Colegio Juan Ramón Jiménez. Paso a paso, año a año, José Rodríguez se ha ganado un hueco en el deporte madrileño.

Estudió Comunicación Audiovisual y para hacer un máster tuvo que irse a la capital de España. Allí sigue más de una década después. Antes, tras el Juan Ramón Jiménez dejó su huella en el Maestría, donde formó los equipos de voley masculinos y femeninos que competían contra colegios. "Por entonces estaban surgiendo las escuelas deportivas de la Obra Social de Unicaja y de Univoley y luego había un montón de colegios como el Azcona, el Stella Maris o el Madre de la Luz que eran muy fuertes".

Cuando llegó a Madrid lo hizo sin tener vinculación con el voley, pero al poco tiempo lo sumó a sus quehaceres diarios. Su primer club en la capital fue el de un colegio privado, el Santa Gema Galgani, con equipos masculinos y femeninos, y de allí pasó al Salesianos Atocha, "que es más famoso", también con equipos en ambas categorías y en 2ª División. Allí estuvo dos años hasta que pasó al CV Sanse para estar tres temporadas. De allí a Torrejón, como segundo entrenador, función que repitió en Nueva Castilla -"un club en Vallecas"-, y antes de llegar esta temporada el Voley Playa Madrid. "Siempre he estado en 2ª y 1ª Nacional. No he podido dar el salto a Liga FEV por el tema laboral, porque requiere una dedicación plena, pero estoy pensando dejar a final de año lo que estoy haciendo -trabaja en el parque temático de la Warner Bros.- y dedicarme un poco más al voleibol", para, entre otras cosas, "sacarme el título de tercer nivel".

Ahora juega menos. Su gran pasión es entrenar, "la ilusión de ver a una niña que no sabe rematar y al cabo del tiempo la ves rematando y ella viene y te da un abrazo porque lo ha conseguido siguiendo tus consejos. Eso te llena de orgullo", relata este almeriense. Esa es su función ahora en el equipo de 2ª División Nacional del Voley Playa Madrid, uno de los filiales del conjunto que esta temporada ha militado en la Superliga 2 femenina.

Reconoce que lo de unir "voley-playa" y "Madrid" es complicado. "Es un poco raro ir con la chaqueta del club por la calle o cuando vas a Almería o Valencia; la gente ve Voley Playa Madrid y se extraña", narra. "La idea", dice, "fue de Felipe Pascual, para que la gente que no pueda jugarlo fuera, porque trabajan aquí, puedan practicarlo". Y explica que, para ello, "en Madrid hay un montón de pistas de voley-playa", citando las más conocidas en la Universidad Complutense o en la Politécnica. Incluso hay proyectos para hacer pistas cubiertas. "El centro de España no tiene playa y ver voley-playa es algo chocante", afirma.

Además de estas pistas, en Madrid han promocionado muy bien la práctica de este deporte, montando canchas en lugares turísticos como en el Paseo de La Castellana o la Plaza Felipe II. "Es una buena forma de promover el voleibol y el voley-playa, que la gente vea que es divertido y que puede jugar todo el mundo. La gente se queda mirando y es un gancho. Es algo que todos los clubes deberían hacer para promocionar el voley, pidiendo algún permiso, aunque está fastidiado porque los ayuntamientos piden mucho dinero". Puso como ejemplo para promocionarlo en Almería "cortar el Paseo y montar una pista. Así consigues llamar la atención de la gente y de los medios". Un tema, el de la promoción, que es lo que falla en voley. "Debe haber personas que gestionen los temas televisivos y los derechos de patrocinadores", cuenta José.

Desde Madrid, Almería se ve "muy pequeñita" pero "tremenda". En cuanto a nivel de voleibol, "la gente lo vive más; aquí hay gente buena, pero es diferente. En Madrid hablas de Almería y todos te dicen que tenemos un equipo muy bueno" y recuerda que "Almería fue pionera en voley-playa", destacando de los campeonatos actuales "el de Mandala Beach" sin olvidarse de "los que organiza Cruzcampo a nivel provincial o los del Patronato Municipal de Deportes". "Con la cantidad de playas bonitas que hay se podrían hacer más, pero faltan más apoyos", finaliza.