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Unicaja Costa de Almería lo deja todo para el Moisés Ruiz

Matt Neaves busca sortear el bloqueo de la defensa soriana en el último duelo en casa.

Matt Neaves busca sortear el bloqueo de la defensa soriana en el último duelo en casa. / Javier Alonso (Almería)

Sí, esta vez hay que apelar al factor cancha si se quiere llegar a la final, porque Unicaja Costa de Almería no fue capaz tampoco de derribar Los Pajaritos. Sigue invicto el feudo numantino y Grupo Herce Soria toma ventaja en la semifinal tras un partido en el que los verdes mostraron una gran consistencia en el primer set, mandaron en el segundo hasta con cinco puntos de renta y firmes en su juego, pero cediendo en los momentos decisivos, y no lograron recuperar las sensaciones ni en el tercero ni en el cuarto. Cierto es que en esta ocasión la situación se agravó por una lesión en la espalda de Paulo Renán.

El Moisés Ruiz tendrá la palabra el viernes con la necesidad de ganar y devolverle a esta eliminatoria el equilibrio, jugándose si es así un partido con tintes de final el sábado, otra vez en el feudo almeriense. El testigo lo coge ahora la afición de Unicaja Costa de Almería en su templo, si bien los fieles no fallaron tampoco desde ‘lejos’ y se reunieron en buen número en el Centro Cultural de la Fundación Unicaja para seguir el inicio de la semifinal unidos. La conjura por su parte está hecha y desde ya se prepara un encuentro decisivo que se disputará en seis días y para el que puede ser duda el colocador brasileño.

El máximo anotador del encuentro fue el opuesto local, Cunha, con 25 tantos, seguido por Neaves, con 17. El saque ha sido una de las grandes claves del encuentro, primero a favor almeriense y después mejor por parte soriana, llevando muy ligado el rendimiento en bloqueo. Grupo Herce ha hecho 8 puntos directos por 5 de Unicaja, con un error más, pero sacando nueve veces más que los verdes. En bloqueo ha habido 15 y 10 por cada bando, brillando Borja Ruiz con 5 puntos. En recepción, pese a todo, los números de los ahorradores son mejores, si bien lo ‘extraño’ ha sido que, por primera vez tras muchísimo tiempo, se ha tenido peor eficiencia atacante que el rival, faltando contundencia.

El partido comenzó con una gran presión soriana en el saque ante unos verdes a los que no les entró prisa con el 4-1, ace de Olalla, y que pensaron a ‘largo plazo’ sobre su plan de partido. Confiados en el bloqueo, esta faceta del juego decantó la balanza de manera definitiva en los momentos determinantes. Hasta ese momento, primero se reaccionó y se tomó delantera con 5-6 y servicio de Víctor Rodríguez. Cunha como referente local en su ataque, otra vez volvieron los tres puntos celestes de ventaja, con tiempo de Carreño (11-8). Paquillo apretó en defensa y comenzó la preocupación soriana ante el muro verde.

El primer set fue para los verdes

Bloqueó Víctor Rodríguez el 13-13 tras atacar una bola alta y separada como solo él sabe hacerlo. Se había sostenido en el pulso Unicaja Costa de Almería, esperando que fuese su turno, y la presión en servicio cambió de color. No iba a ser sencillo descolgar a Grupo Herce Soria, pero se logró con el 18-20 gracias a un bloqueo de Jorge Fernández. Toribio pidió su segundo tiempo, pero su equipo no tuvo acierto y concedió error desde el saque al asumir riesgo, volando ya los verdes hacia el 0-1 a fuerza de más bloqueo. El 22-25 fue precisamente otro que firmó Borja Ruiz para dar incluso más tranquilidad.

De hecho, el segundo set comenzó con los verdes totalmente metidos en el papel de ir a por todas, con ventaja desde el inicio y su habitual juego coral en ataque. Se tuvo un 4-6 que con coraje difuminó Grupo Herce Soria, pero Unicaja Costa de Almería fue superior en la red de nuevo y con 7-11 Toribio se quedó sin tiempos muertos. Fran Ruiz a servicio había hecho un ace y había dado una free aprovechada para meter tierra de por medio. Matt Neaves cogió su sitio en el ataque (9-13), siendo constante el ritmo ahorrador hacia el 0-2, aunque había mucho que remar todavía, sobre todo por la calidad castellana.

De hecho, los locales se situaron a un punto con el 14-15, provocando un tiempo verde, provocado por el saque de Pepe Villalba. El murciano hizo ace para el 15-15, lo que tuvo continuidad con error de ataque almeriense para el 16-15 y contraataque soriano para el 17-15. El segundo tiempo de Charly provocó el error del receptor para salir de rotación y que Fran Ruiz igualase. Un ace de Tenorio devolvió los dos (19-17), se lo devolvió Borja para el 20-20. Se jugó al juego y al ratón, un paso por delante Soria, dos con el 24-22 y la igualada se produjo con otro error de ataque ahorrador (25-22).

La comparación podía ser con el choque de la primer vuelta, similar en su desarrollo hasta ese momento, esperando que saliera a flote su fortaleza. Se había tenido muy controlado el set, luego se peleó en el tramo definitivo sin suerte y había que encajarlo. Se comenzó con Neaves anotando, importante, y subiendo el 0-2. De nuevo volteó el marcador Grupo Herce Soria con el saque de Aulisi (3-2) y se marchó con mucha defensa (6-3) ante falta de contundencia en ataque por problemas en recepción. Con 7-3 paró el partido Carreño y no pudo cortar la racha negativa, con el fantasma de diciembre sobrevolando (8-3).

Los sorianos siguen intratables en casa, que no han perdido en todo el curso como locales

Se ponía a prueba todo lo que se había trabajado en los meses anteriores y el saque de Fernando Fernández, con bloqueo de Borja, acercó a los verdes (9-7), pero no se tenía regularidad y Charly de nuevo pidió tiempo con crisis en el juego (12-7). Era cuestión de sumar sensaciones mientras que Borja con bloqueo tiraba del carro. Una pipe de Víctor (13-10) pudo hacer de enganche, y una defensa de Neaves y remate imposible del mismo palentino provocó el tiempo local (13-11). Aulisi con otro ace destruyó parte de lo hecho (16-12) y se concedió error en saque al asumir riesgo, marchando los locales al triunfo.

Neaves volvió a aparecer y del 18-13 se avanzó al 18-15. Tampoco se dio el paso en esa ocasión, con Paulo Renán sustituido en el 20-15 para ser atendido por Jorge Soriano en el banquillo. Hubo un 22-15 contra un Soria al que todo le salía, peleando los verdes por las sensaciones con Vizcaíno en cancha jugando unos buenos minutos (22-18). Se perdió por 25-20 y había herida en el orgullo. El cuarto set comenzó mal (3-0), sin fluidez y sin continuidad, tiempo muerto ya en el 5-1, seguido de un ace de Aulisi, otro más (6-1), un as en la manga de Toribio que no había sido titular. Fran Ruiz cortó la sangría.

El 8-5 costó tres remates ante la intensidad defensiva loca, a la par de que no se metía el saque y se allanaba el camino a los de Toribio sumando también errores en ataque. El cambio de colocador fue obligado con 10-5, Paulo Renán lesionado, y tenía Vizcaíno que asumir el mando. El 12-6 significó el segundo tiempo de Carreño, buscando calmar a los suyos para afrontar una recta final complicada. Cinco abajo, la necesidad de dar el paso al frente que no se había hecho hasta el momento era ya obligada. El saque de Fran fue una esperanza, bloqueo de Borja para el 14-11, tiempo de Toribio y ace del cordobés.

El 14-12 lamentablemente se siguió de la suerte de Flores en un ace ‘de la red’, otra losa a la espera de hacer daño desde el saque, la asignatura pendiente. Quien sí siguió a lo suyo fue Grupo Herce Soria con Villalba, ace para el 21-14. La suerte del ‘ace de la red’ fue de Víctor en el 21-16, en un momento mucho más estéril que el encajado. La pipe de Víctor maquilló algo más el resultado parcial del set, como el ataque de Fran Ruiz, que fue al saque con todo, aunque los sorianos estuvieron certeros en recepción y ataque y cerraron el choque con 25-19. Se comenzó la semi en desventaja, todo al Moisés Ruiz.

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