Historias taurinas de Almería: la feria de hace 25 años
Tauromaquia
Lo más notable de aquella feria taurina de 1999 fue la alternativa de José Olivencia, que le dio Enrique Ponce con El Juli de testigo
Eran los años de seis corridas de toros y una novillada, con toros que no se caían
Historia de la plaza de toros de Almería: el coso actual
Aquella feria taurina de 1999 se recuerda especialmente porque José Olivencia, el niño de La Cañada, tomó la alternativa; y no de manos de cualquiera: se la dio Enrique Ponce y El Juli fue testigo de ello. Eran los años en que los toros estaban bien presentados y no se caían al tercer muletazo, en los que había que hacer cola una mañana entera en la calle Ayala para conseguir un par de entradas de sombra, en los que funcionaba la reventa, en los que había seis corridas de toros y una novillada, en los que la plaza presentaba cada tarde un lleno hasta la bandera (quizá un hueco en el ‘maldito’ tendido 7), en los que el espectáculo más esperado de la Feria eran los toros.
Hace 25 años, dos almerienses lidiaron novillos de Fco. Ojeda: Jesús Almería (silencio, palmas y oreja en que el que mató por Ricardo Torres) y El César (oreja y ovación). Y el lunes el festejo más esperado: la alternativa de Olivencia, ante toros del Puerto de San Lorenzo y cartel de lujo: Ponce (oreja y 2 orejas), El Juli (oreja y oreja) y José Olivencia (oreja y ovación). Así recuerda el paisano aquel 23 de agosto de 1999:
“Esta efeméride de redondear años, en este caso 25, me propician recuerdos, me evocan sentimientos y me llevan de manera espontánea a hacer balance por la conquista del sueño de un niño por ser matador de toros. Para mí, y para todos los que me ayudaron con una ilusión hoy inimaginable, ese duro y sacrificado recorrido, aún sin haber llegado a ser figura del toreo que hubiese querido, ha sido inmensamente satisfactoria y feliz. Ser torero de alternativa es, eso sí, un imposible que conquisté. Una medalla única que nadie me quita y que me enorgullece. La tauromaquia me ha enseñado muchas verdades de la vida, me ha inculcado valores difíciles de encontrar en otros lugares, me facilitado llegar a seres humanos inigualables como lo son mis compañeros profesionales, me ha hecho rico en amistades, me ha llevado a crear una familia gracias a ese caminar juntos tan fácil de la mano de Noelia y proyectándonos en mis hijos Jose y Paula. ¿Qué más puedo pedir?”
“Sí, mirar ahora atrás me empuja a seguir luchando con más fuerza y argumentos como empresario y apoderado sin olvidarme que sigo siendo, porque eso nunca deja de serlo uno, matador de toros desde hace un cuarto de siglo. No puedo menos que agradecer a la vida todo lo que me ha dado. A mis padres, hermanos y toda mi extensa familia, a los que siguen siendo o fueron mis seguidores, a los empresarios y ganaderos que en mi trayectoria me abrieron puertas y a los que ahora me consideran y me siguen teniendo en cuenta, a todos aprovecho esta oportunidad para trasmitirles mi agradecimiento con mayúsculas”.
Pero aún faltaban cinco tardes más. ¡Qué tiempos aquellos! El martes, toros de Zalduendo, con Rivera Ordóñez (ovación y oreja con dos vueltas al ruedo), José Tomás (2 orejas y 2 orejas con petición de rabo) y Morante (2 orejas y ovación). Los Algarra del miércoles los lidiaron Espartaco (vuelta al ruedo y ovación) Ponce (ovación y ovación) y Abellán (oreja y oreja). Torrealta mandó el jueves un buen encierro para ElCordobés(ovación y 2 orejas) José Tomás (ovación y oreja) y El Juli (ovación y oreja).
Ya en la recta final, el viernes los toros fueron del Marqués de Domecq para César Rincón (ovación y ovación), Manuel Caballero (ovación y ovación) y Ruiz Manuel (oreja y 2 orejas). Cerraron la Feria taurina los toros de Sánchez Arjona que lidiaron Manzanares (ovación y palmas) Vicente Barrera (palmas y oreja) y Morante (palmas y oreja). El Capote de Paseo con la imagen de la Virgen del Mar de hace 25 años fue para José Tomás.
También te puede interesar
Lo último