Aguilera, preocupada por la caída del consumo de vino como bien cultural

El Gran Hotel se transformó ayer en un hervidero de apasionados por el vino. Pero no por cualquier vino, sino por los que se elaboran en la provincia.

Almería cuenta con una veintena de bodegas, que se encuentran asociadas bajo el paraguas de Asempal, que cultivan alrededor de 1.000 hectáreas de viñedo y producen en torno a 2,5 millones de litros al año.

Estas empresas familiares exhibieron ayer el fruto de su trabajo en este hotel capitalino en la III Muestra de Vinos de Almería, que contó con una catadora de excepción: la consejera de Agricultura y Pesca, Clara Aguilera.

La máxima responsable agrícola de la Junta alertó del descenso en el consumo de vinos en la actualidad, "cuestión que nos preocupa", dijo, y recordó que el vino "está ligado a la cultura andaluza", por lo que hizo un llamamiento para impulsar "la tradición social de degustar una copa de vino".

Aguilera aplaudió la labor que están realizando los bodegueros almerienses por perpetuar esta tradición que el presidente de la Diputación Provincial, Juan Carlos Usero, también presente en el acto, calificó de "milenaria".

La consejera afirmó que el gran reto de los bodegueros pasa por identificar al consumidor y ofreció "todo el apoyo de la Junta" en los proyectos que emprendan, asegurando que el camino para lograr su objetivo pasa por la producción de calidad, "y ese camino ya lo están recorriendo".

También hizo hincapié en el trabajo que realiza el vino como elemento de promoción turística, lo que otorga al sector vitivinícola un valor añadido. Precisamente, las bodegas de Almería acaban de presentar a la Junta un anteproyecto sobre las necesidades que poseen para la promoción de sus vinos en relación con el turismo, que ha contado con una buena acogida por parte del Gobierno autonómico. A finales de 2008, los consejeros de Turismo, Luciano Alonso, y de Agricultura y Pesca, por aquel entonces, Martín Soler, firmaron en Almería un acuerdo para impulsar el turismo enológico a través de la promoción y la comercialización de los vinos.

Aconsejó a los bodegueros almerienses a seguir "paso a paso" lo que han hecho algunas de las zonas vinícolas andaluzas con gran tradición, como Conil, Jerez, Granada o Málaga.

La presidenta de la Asociación de Bodegas inauguró la muestra recordando las virtudes que atesoran los caldos almerienses, caracterizados por la textura y el sabor que le confieren las especiales condiciones climatológicas, con una gran cantidad de sol, así como el terreno y la altura con el nivel del mar, y puso como ejemplo de calidad en su trabajo los múltiples premios nacionales e internacionales que los vinos de la provincia acumulan a sus espaldas, así como su aparición en las mejores revistas especializadas. "Catadlos, esa será su mejor carta de presentación", concluyó.

El presidente de la Diputación puso el acento en la labor que realizan estas pymes a la hora de fijar la población al territorio, pues todas las bodegas se ubican en pequeños municipios, que son "la esencia de Almería", dijo.

Usero recordó las dificultades que tienen estas empresas radicadas en poblaciones de escaso tamaño, por lo que puso sobre la mesa el "papel estratégico" de las administraciones para apoyarlas, por su capacidad para generar riqueza y empleo.

El máximo mandatario de la institución provincial enumeró las diversas zonas productoras de vino en Almería, que se han unido a la actual revolución por el mundo del vino y que están consolidando su presencia en la gastronomía española: Fondón, la Comarca de Nacimiento, Adra, Alcolea, Laujar de Andarax, Alboloduy, Tíjola, Serón, Padules, Abla, Oria, Uleila del Campo y Purchena.

Usero aseguró que los vinos de Almería ya se han hecho un hueco, además de en el mercado nacional, en países como Francia, Bélgica, Holanda y Alemania. Una tarea que requiere de la promoción internacional, por lo que ofreció el apoyo de la institución provincial para que estas empresas puedan participar en las ferias agroalimentarias más importantes del sector, para que puedan "generar más riqueza y bienestar social para los pueblos de Almería".

Las firmas participantes ayer eran: Bodega Fuente Victoria, Selección de Vinos de Fondón, Bodegas el Cortijo de la Vieja, Viñedos y Bodegas Bolabana, La Bodega de Alboloduy, Barea Granados, Bodega Ecológica Cortijo El Cura, El Pintao Viejo, Heredad Pérez Ferre, Bodega Antonio Jiménez, Bodega Brandy Almería, Bodegas Valle de Laujar, Bodegas Viñalmanzora, Hacienda Capellanía, Bodegas Gabriel Torrente Cuevas, Finca Onegar y Condados de Ojancos.