La Delegación Territorial de Medio Ambiente de la Junta en Almería ha otorgado autorización ambiental unificada a la empresa Pescaviva Real, como granja del Grupo Culmarex, para la ampliación de la instalación de cultivos marinos para el engorde de dorada y lubina mediante 12 nuevas jaulas flotantes frente al término municipal de Pulpí (Almería).

Este proyecto incluye la instalación en el mar de 12 jaulas de engorde de 28,6 metros de diámetro y tres jaulas auxiliares, en un área de ocupación de dominio público marítimoterrestre de 594.062 metros cuadrados anexas a las 24 que ocupan actualmente la instalación, según consta en la resolución consultada por Europa Press.

La instalación finalmente estará constituida por 36 jaulas que ocuparán un perímetro de 90 metros. Cada una de las jaulas contempla un volumen de 11.000 metros cúbicos para cultivo mientras que nueve jaulas se destinarán a los despesques, con lo que tendrán 16 metros de diámetro y 1.600 metros cúbicos de volumen.

Se pretende una producción final, después de la ampliación, de 4.500 toneladas, producción que se alcanzaría en fases, alcanzándose cifras cercanas a la producción máxima autorizada a partir del cuarto año tras la instalación. La ampliación se realizará en una fase, mientras que la introducción de los alevines se realizara en función del plan de producción.

En este proyecto las instalaciones en tierra serán las ya existentes en la población de Águilas (Murcia), sede del Grupo Culmarex, así como toda la flota de embarcaciones destinadas a la actividad tendrán su punto de atraque en el puerto pesquero de Águilas.

La granja ocupará un perímetro de 90 metros; las instalaciones en tierra siguen en Águilas

El proceso productivo se inicia con la recepción de alevines en la granja, para lo que son transportados desde el criadero en un barco especial preparado para este fin y descargados directamente en jaulas fondeadas en el mar, en libertad de movimiento y protegidos de depredadores. Una vez depositados, se inicia el proceso de engorde en el mar con tareas de control de crecimiento y alimentación de los ejemplares hasta que alcanzan su tamaño comercial.

Así, la pesca de los ejemplares se lleva a cabo durante la noche o el amanecer "extrayendo sólo la cantidad necesaria, sin excedentes, en las jaulas comerciales instaladas para tal efecto". Esta actividad se realiza con cuidado para no dañar los peces, que son depositados en tanques isotérmicos con agua de mar y hielo hasta su traslado a la planta de envasado.