Antonio López salió reelegido presidente de la Comunidad de Usuarios de Aguas de Níjar (CUCN) por 580 votos a favor sobre los 519 de Juan Espinosa, en la asamblea general ordinaria celebrada este sábado, desde la tarde y hasta bien entrada la noche, que acabó con las elecciones a la presidencia.

Antonio López y Juan Espinosa se sometieron a la soberanía de los socios para depositar la confianza de la gestión del agua en la Comarca de Níjar para un periodo que está marcado por grandes retos, entre ellos la concesión de agua por parte de la desaladora de Mar de Alborán.

La asamblea contó con más de una decena de puntos. Estos abordaron desde la aprobación de las dos actas de las anteriores asambleas hasta las cuentas y el presupuesto de la entidad. Dichos puntos del orden del día, aunque desarrollados de manera más ágil y debido a la lentitud con la que se desarrollo el proceso electoral, que a última hora y por petición de algunos comuneros cambió el procedimiento, provocó que la asamblea finalizara a altas horas de la madrugada.

La CUCN es la única organización a cargo del suministro y distribución de agua desalada en el distrito de Níjar desde su creación en el año 1.999. En ese periodo ha conseguido convertirse en un referente mundial en la gestión del agua en su zona de influencia, especialmente caracterizada por la escasez de precipitaciones y de recursos subterráneos de los que dispone y de los que hay necesidad de preservar. Es más, tal es la importancia de su gestión que su radio de acción va más allá del campo de Níjar. Y es que esta comunidad distribuye y garantiza el agua en áreas de cinco términos municipales: Níjar, Lucainena, Sorbas, Carboneras y Almería.

Por tanto, las condiciones semiáridas de este distrito y el estrés hídrico intensivo en la región de Almería hacen que la CUCN sea uno de los usuarios más importantes de las comunidades de agua en España.En estos más de veinte años ha conseguido hitos tan importantes como la concesión de agua por parte de la desaladora de Carboneras, fruto de un convenio firmado en 2006 y con una duración de cincuenta años. Además, esta infraestructura se encuentra actualmente pendiente de iniciar una reforma para una mayor eficiencia energética que permitirá que CUCN ponga a disposición de sus agricultores del orden de 2,5 hm3 más, eso es un 10% de los que cuenta actualmente.

Además, la institución ha conseguido implantar en estos años unas infraestructuras que hoy son referente y únicas en Europa a nivel de regadío y en las que tanto la administración andaluza como gubernamental han invertido muchos recursos.

Aún con todo ello, la comunidad tiene ante sí retos muy importantes, como es la posibilidad de contar con el agua de la desaladora de Mar de Alborán, puesto que ha quedado patente en el último lustro que es necesario un aumento del suministro para extraer aún menos de un maltrecho acuífero que necesita de muchos años para ir reponiéndose. Por otro lado, se está trabajando en la capacidad de embalse, para que los meses de septiembre y octubre, donde la necesidad es mayor para todos, no falte agua. En este sentido, la CUCN tiene proyectada una nueva balsa (que se uniría a las usadas por CUCN y Acuamed que pueden sumar 1,4 hm3), la que sería la denominada como ocho, para albergar los restantes que hagan frente, precisamente, a esas épocas de otoño donde hay picos de demanda y se une a la escasez.