El Campo de Níjar, en peligro: “Parar la desaladora en septiembre sería catastrófico”

Los responsables de la planta de Carboneras quieren detenerla para su arreglo en los meses de máxima demanda de agua para la agricultura

Los regantes de Níjar buscan fuentes alternativas a la planta de Carboneras: "Estuvimos en peligro"

Los problemas técnicos de la desaladora de Carboneras siguen dañando al Campo de Níjar. El arreglo que necesita la planta, alguno de cuyos bastidores están seriamente dañados lo que le ha llevado a funcionar con solo nueve, implica su parada por motivos de seguridad. Lógico y normal.

El problema es la fecha que han fijado los técnicos de la empresa Acuamed: el 1 de septiembre. Detener la producción de agua desalada esos días, con la acuciante necesidad de aporte hídrico que necesitan las plantaciones de la comarca nijareña en las primeras semanas de cultivo, es un golpe de gracia para los agricultores, cuya viabilidad depende prácticamente de forma exclusiva de Carboneras. La situación es muy compleja, puesto que llega en un momento en el que la Comunidad de Usuario de Agua del Campo de Níjar no tiene suficientes reservas, puesto que tuvo que tirar de ellas cuando el apagón eléctrico de finales de abril.

Si se para el 1 de septiembre es el final para muchas familias agricultoras nijareñas” — Antonio López - Presidente de la CUCN

“Pedimos que se haga la parada el 1 de noviembre, que el consumo en los invernaderos baja en un 50%. Lo normal es que para entonces Mar de Alborán ya esté funcionando con entre 15 y 20 hm3; pedimos que se aceleren las obras de Endesa para llevar más energía a la instalación, ya que aumentaría las garantías para noviembre. Estos dos meses son la vida. Si la planta se tuviera que parar por algún problema grave, lo entedemos todos; pero si se puede posponer la decisión, es la vida para nuestro campo”, aseguraba Antonio López en una entrevista en Interalmería TV.

El presidente de la CUCN, reivindicativo, pero consciente de que hay que llegar a la mejor solución porque está el juego el sustento de las miles de familias nijareñas que viven de los invernaderos, confía en la intersección del Gobierno de España para que Acuamed recapacite y posponga la fecha inicial del comienzo de las reparaciones. “En septiembre necesitamos el agua, además de que abastecimiento y turismo están a tope de consumo. Es algo que no tiene sentido, que perjudica más que beneficia. Hemos pedido una reunión urgente de la Comisión de Seguimiento que tenemos entre la CUCN y la empresa pública Acuamed. No me pueden decir que se va a parar y que vamos a funcionar con solo seis bastidores año y medio, eso no es posible”, dice sin terminar de entender el por qué de esta decisión unilateral. Además, el presidente de los comuneros pide que ya que se va a detener la planta, sea para reparar los seis bastidores y no dos como está previsto.

A partir de este mes podrán llegar unos 40.000 m3 de otras fuentes en una “situación de emergencia”

De Carboneras ahora mismo está llegando a la CUCN unos 35.000 m3 diarios, lo que permite repartir a la comarca y apenas almacenar. A partir de estos primeros días de agosto, eso sí, habrá un repunte de unos 40.000 m3 de distintas fuentes. “Debemos de tener la potabilizadora del levante, y teóricamente llegarán unos 20.000 m3 de agua del trasvase para abastecimiento que dejará de coger de Carboneras. Luego hay una moneda al aire: existe una desaladora de una comunidad de regantes de Cuevas, que produce agua agrícola, pero no tiene los índices de abastecimiento. Hemos conseguido que sea útil en un 99%, lo que implicará que tengamos que montar unas instalaciones en una desaladora que no es nuestra. Además, las administraciones tendrán que dar el visto bueno para que ese agua pueda ir a abastecimiento, unos 20.000 m3 más”. Habrá que hacer entonces un cambio de aguas para que la de abastecimiento pase al pantano de Cuevas y la de la desaladora de Cuevas, a abastecimiento. lo que necesita de la firma del consejero: “Deseamos que se produzca ponto para afrontar una situación de emergencia como ésta”, apunta Antonio López.

Son pocos días los que hay por delante para llegar a un acuerdo que salvaría la campaña. “Perder una campaña supone unos gastos que no recuperas en una década, sería el final para muchas familias nijareñas”. Por eso, tendiendo la mano en un primer momento al Gobierno de España, pide sino que los regantes se movilicen para que una vez más demuestren la fuerza que tienen: “Hace 20 años estuvimos en Aguadulce, cuando vino el entonces presidente de la Junta, Manuel Chaves, y en la puerta de la subedelegación del Gobierno, manifestándonos por nuestro futuro. Parecía imposible que nos hicieran la desaladora, pero el campo de Níjar lo consiguió. Estamos en una situación similar: si no llegamos a una solución para que la obra se haga en noviembre, toda la comarca tiene que estar en la calle”, pide Antonio López.