La contracrónica de Infoagro Exhibition 2025: calor, paella y ganas de hablar del campo

El sol que caía en la mañana de este miércoles sobre Aguadulce era un castigo para cualquier viandante. A las doce del mediodía, el mercurio sobrepasaba los treinta grados y estar dentro del Palacio de Congresos era un premio. Esa era la hora marcada para inaugurar Infoagro Exhibition 2025, la feria que habla del campo en su epicentro, junto al 'mar de plástico' que llega a verse hasta fuera del planeta. Aunque la apertura oficial de las actividades estaba marcada para esa hora, la vida en el recinto era incensante desde el amanecer. Cada uno de los stands habían estado preparando a contrarreloj cada uno de los centímetros de su espacio.

Las cifras, de vértigo, aportadas por la organización en las semanas previas ya hacían ver que sería complicado moverse por el lugar sin encontrarse con un conocido: 660 empresas y 57.000 profesionales concentrados en un espacio de 19.992 metros cuadrados, una superficie que ha habido que aumentar para dar respuesta a todas las empresas que quieren participar. Y, sin duda, las amenazas de que el palacio estaría a rebosar se cumplieron. Hubo, ante todo, empresas de Almería, pero no solo, pues hasta representación de China, un país que quiere construir hasta noventa millones de hectáreas en diez años, según EFE, se pudo encontrar paseando por las dos plantas con las que cuenta el recinto de expositores.

Los hay más pequeños o más grandes, según las necesidades de cada empresa, pero en todos ellos el primer balance apuntado en esta primera jornada es el mismo. "Está todo lleno", era fácil escuchar por las empresas cuando este periodista, de forma humilde, intentaba abrirse paso en busca de declaraciones. La tendencia, esperan, que se mantenga así durante los dos días que aún restan de este evento.

Caras de satisfacción era lo que se podía ver en la inauguración. “La muestra es fiel reflejo y un escaparate internacional de la vanguardia en la que se basa el sector agrícola almeriense, que contribuye a la exportación, no sólo de productos hortofrutícolas, sino de la tecnología desarrollada en esta tierra para dar servicio al agricultor, que ya en otras zonas del planeta demandan, en su intento de seguir los pases de la agricultura intensiva que se lleva a cabo en Almería”, aseguró a quien le ha tocado estar en el otro lado de la feria, Rodrigo González, Presidente del Comité Organizador de Infoagro Exhibition.

Habrá tiempo para hablar largo y tendido sobre la situación de la agricultura intensiva en estos días, pero, ante todo, este cónclave es una oportunidad para reunirse y celebrar, compartir momentos ahora que la cosecha está finalizada y es hora de hacer balance. Era difícil pasear sin cruzarse con algún conocido, menos aún encontrar un hueco para charlar con los ‘pesos pesados’ del sector, aquellos que trabajan para que el campo siga siendo el motor económico de la provincia, un motivo para que el planeta nos mire. Las mesas estaban copadas de largos corrillos, negociaciones para cerrar nuevos acuerdos y conversaciones para conocerse.

Aunque el bullicio económico y empresarial de la mañana dejaba paso, con el paso de las horas, al cónclave social que se originaba en cada puesto en el que iba saliendo algo de comida. Eran las dos de la tarde y el olor a paella se colaba por cada esquina del pabellón. Los camareros se veían sumergidos en una multitud que quería degustar el arroz allí donde había. Otros se conformaban con bandejas de tomate o de embutidos, snacks igualmente apetecibles para capear una intensa jornada que se prolongó, a la hora de la siesta, con nuevas presentaciones y reuniones. El menú previsto para hoy es el mismo, aunque cada día en una feria es un mundo diferente.