II Foro Agrobío: El control biológico, herramienta estratégica del campo almeriense

Si interesante fue y un buen escenario tuvo el I Foro Agrobío celebrado en agosto de 2023, dos años después se han superado con creces las expectativas. El Auditorio del Centro Financiero Cajamar, un lugar imponente, acogió a decenas de técnicas que escucharon durante toda la mañana de este jueves las distintas intervenciones de siete ponentes de alto nivel.

Titulado A la vanguardia del control biológico, el foro se consolida como un espacio clave para conocer las estrategias más innovadoras que están marcando el presente y futuro del control biológico de plagas. En su 30 aniversario como bastión importante de la agricultura almeriense, Agrobío reafirma su compromiso con la innovación y destaca su labor en la mejora continua de insectos auxiliares de alta calidad, el desarrollo de razas y estrategias eficaces frente a plagas emergentes como trips invasores, araña roja o pulgón.

El turno de presentaciones lo inició Sergio Pérez, director general de Cajamar, entidad comprometida con el desarrollo del agro local. “Agrobío es una empresa con la que compartimos una serie de valores como la apuesta clara por la innovación, por la investigación, por la sostenibilidad y también por la transferencia del conocimiento. Valores que perfectamente me servirían para definir lo que desarrollamos nosotros en nuestra Estación Experimental Cajamar. Precisamente con Agrobío colaboramos estrechamente en muchos y muy interesantes proyectos”, apuntaba.

Las primeras palabras de José Antonio Santorromán, gerente de Agrobío, iban precisamente dirigidas a dar las gracias a Cajamar puesto que el origen de su empresa estuvo “aquí, en esta casa”, como tantas otras empresas y tantos agricultores almerienses pueden decir.

También quiso recordar Santorromán una fecha, el año 2007, que para él “marcó un antes y un después” en el desarrollo de la producción intensiva almeriense. “Veníamos de un período difícil debido a las alertas sanitarias que estaban saliendo, lo que complicaba mucho la situación de mercado. Tras este año, Almería se ha convertido en un referente mundial de cómo hay que hacer las cosas bien y debemos de sentirnos orgullosos del gran trabajo de mucha gente en pro de la agroalimentación almeriense”, decía.

Por supuesto, el control biológico fue la herramienta eficaz que logró el despegue del campo almeriense. “Nos ha dado muchísima seguridad en los invernaderos. Para la comercialización es muy importante que los que los productos sean fiables y los de Almería lo son. Debemos seguir trabajando y buscando soluciones en esa dirección”.