La planta navideña que ya se cultiva en los invernaderos de Almería: "Este año está muy bonita"

La Feria de Almería marca el final del mes de agosto, no así del verano ni del calor. Los termómetros seguirán estando altos y el sudor seguirá impregnando la frente de los ciudadanos. Quien más quien menos ya tiene ganas de ver alguna que otra nube en el cielo, sacar las sudaderas del fondo del armario, oler nuevamente a calle mojada por la lluvia y ver los pascueros en las tiendas.

Varias semanas todavía de intenso calor por delante, un par de meses todavía para sacar las cajas con las decoraciones navideñas, a pesar de que en Almería ya se cultiva la Navidad. Entre las muchas curiosidades que tiene la agricultura, una es la producción de la la poinsettia o flor de pascua. Se trata de una planta que decora las casas cuando las mantas están al pie del sofá, pero que crecen al amparo del sofocante verano almeriense.

“La poinsettia es muy exigente: cualquier cambio de luz, agua o temperatura se nota de inmediato. Es una planta que requiere atención constante”, explica Jordi Solís, gerente de Solisplant, que apunta al cultivo artesanal de la misma: “Hay días que volvemos a la finca por la tarde solo para asegurarnos de que el riego ha sido el adecuado. Es una planta tremendamente delicada, pero este año está especialmente bonita”.

La provincia es una de las principales productoras de pascueros en toda España. De hecho, además de frutas y hortalizas, Almería destaca también por su producción y venta de flor cortada y planta ornamental. En el caso de Solisplant, rozará esta campaña las 275.000 plantas propias y comercializará hasta 365.000 unidades. “El cultivo se va haciendo por fases: los formatos grandes se plantan a mediados de julio, mientras que los más pequeños los hemos sembrado en agosto y septiembre”, dice Solís. Tras el trasplante, llega el momento del pinzado, y cada planta recibe su gotero para asegurar un desarrollo uniforme.

“La gente se sorprende al saber que en pleno agosto estamos trabajando ya en la Navidad. Aunque el pascuero no es una planta especialmente rentable, como pueden ser los potos o las diplodenias, tenemos que producirla porque es una tradición. Al final, la Navidad viene marcada por el turrón, el cava y la flor de pascua”, comenta el gerente de Solisplant, que habla de las distintas variedades que producen, con la roja como estrella: “Cada año intentamos sorprender con alguna variedad o formato, pero no es fácil. La mejora genética lleva tiempo. Lo que sí buscamos es una planta más perfecta, con mejor brotación, floración y resistencia”.

A su perfecto estado cuando tenga que subirse a un camión rumbo a los distintos mercados españoles y europeos [Portugal, Francia y norte de Italia], contribuye también la lucha biológica. “Intentamos evitar el uso de químicos. Cada vez regulamos más el crecimiento con luz y usamos controles naturales para plagas como la mosca blanca. Y los resultados se notan”, afirma.

No saquen aún los jerseis de lana no vaya a darles una insolación. Pero sí ahorren los primeros euros, que no hay Navidad que se precie sin un pascuero, la planta que nace en el verano almeriense.