Cecilio Pregrín, director corporativo de Primaflor

“La tecnología y las soluciones ‘cloud’ han permitido al sector continuar la actividad”

  • Diputación Provincial de Almería premia la responsabilidad social de Primaflor. A pesar de ser un año difícil, la empresa facturaba 190 millones de euros en 2020, diez millones más que en 2019

Cecilio Peregrín, director corporativo de Primaflor

Cecilio Peregrín, director corporativo de Primaflor / Diario de Almería

–La Diputación Provincial de Almería ha concedido a Primaflor uno de sus premios a la responsabilidad social empresarial cuya cuantía económica (3.000 euros) ha decido donar a Cepaim, ¿por qué esta fundación?

–Alineada con los objetivos propios de la Fundación Primaflor de promocionar actividades que mejoren el bienestar social y la calidad de vida de las personas, hemos querido apoyar a Cepaim por la gran labor que desarrolla por los derechos de los más necesitados, promocionando y favoreciendo la integración, la convivencia y la cohesión social de los más desfavorecidos.

–Ocho principios rigen la RSE de la compañía: la creencia en la tierra como parte de su producto, en la Dieta Mediterránea, en las personas, en la tecnología limpia y sostenible, en la salud como derecho de todos, la internacionalización, la investigación como base del conocimiento y la vida activa, ¿en este año, desde que se declarase el primer estado de alarma, hay alguno de estos que haya adquirido mayor protagonismo?

–Todos esos principios siguen manteniendo total vigencia porque no dejamos de trabajar sobre todos ellos. No obstante, sí que es cierto que las personas se han convertido en uno de los puntos en los que más incidencia hemos puesto. No solamente en las que conforman los equipos de Primaflor sino, también, las de todas aquellas asociaciones, fundaciones u organizaciones que a lo largo de este año nos han pedido colaboración en la alimentación de quien, por circunstancias, lo necesitaba.

–En 2019 pusieron en marcha la Fundación Primaflor, ¿cuáles son sus ejes principales?

–La Fundación Primaflor es una organización sin ánimo de lucro, creada para materializar los valores de Primaflor y cuyos principales objetivos son la promoción de actividades educativas, culturales, formativas, deportivas y asistenciales que mejoren la calidad de vida, además de promover la responsabilidad social, el espíritu de equipo, la economía social y los valores constitucionales.

–En el pasado mes de diciembre la empresa recibió en el evento Murcia Sport Business otro reconocimiento por su apoyo al deporte y a la promoción de la vida activa y saludable. En este sentido patrocina al equipo ciclista Primaflor Mondraker X-Sauce y participó en la última Titán Desert, ¿qué acciones estáis llevando a cabo este año en cuanto a la actividad deportiva?

"Ocho principios rigen la RSE de Primaflor. Las personas han sido uno de los puntos en que más hemos incidido este año”

–Además del patrocinio del equipo Primaflor Mondraker X-Sauce, que es lo más conocido por su trayectoria y las clasificaciones de los últimos años, 2 y 3 en UCI y nuestra participación en la edición de la Titan Desert celebrada en Almería, llevamos realizando desde hace años los patrocinios a equipos más locales de triatlón, balonmano, … y, últimamente, a dos jugadoras de tenis con una gran proyección. En definitiva, apoyo al deporte base.

–La empresa se ha sumado a la campaña ‘Perfectamente Imperfectos’ de la Asociación 5 al día para luchar contra el desperdicio alimentario, ¿qué queda por decir para combatirlo y concienciar a la sociedad?

–El desperdicio alimentario supone un grave problema y es importante concienciar a la sociedad de la necesidad de no desechar los productos por su apariencia externa, mientras conserven todos sus nutrientes intactos y estén en perfectas condiciones de consumo. Por ello, la campaña lanzada por “5 al día”, a la que nosotros también estamos apoyando, es tan importante ya que incide sobre esta cuestión y recuerda que la vida útil de los alimentos va más allá del cumplimento de normas estéticas en términos de color, forma o tamaño, primando por encima de todo la calidad. Hay que conseguir que este mensaje cale plenamente en la sociedad y, para ello, es fundamental el desarrollo y divulgación de este tipo de campañas de manera periódica.

–Los productos de Primaflor, más allá de los lineales de los supermercados, han sido accesibles a las personas más vulnerables durante esta crisis sanitaria. Si bien las donaciones no son una novedad para la firma, ¿cuánto se han incrementado por la crisis sanitaria? ¿Tienen calculado el volumen donado a toda España?

–Como comenté antes, hemos intentado colaborar, en la medida de nuestras posibilidades con todo aquel que nos ha pedido ayuda.  Evidentemente, el incremento de estas peticiones ha aumentado de una manera considerable y lo importante, al fin y al cabo, es poder ayudar a quien lo necesita y no tanto el cuánto.

–Durante este año no han faltado los guiños a sus trabajadores, incluso a los familiares de estos, para agradecer su labor ¿cómo definiría el capital humano de Primaflor?

–Para nosotros, nuestros trabajadores son parte son parte fundamental de la gran familia que componemos Primaflor. Durante esta crisis sanitaria todo el mundo ha hecho un gran esfuerzo y, a pesar de la dificultad de las circunstancias, nuestros equipos han respondido de una manera excepcional. Gracias a esta dedicación y compromiso de toda la plantilla de Primaflor hemos sido capaces de, en pleno confinamiento, sacar la producción adelante, lo que permitió garantizar el abastecimiento de alimentos saludables a todos los españoles. Entre otras cosas, hemos intentado trasladarles nuestro agradecimiento a través de sus hijos, de los niños, posiblemente los grandes sufridores de esta situación.
–Respecto a los datos, la compañía cerraba 2019 con una facturación de 180 millones, ¿cómo han sido los resultados en 2020?
–A pesar de ser un año difícil, en 2020 hemos incrementado un poco la facturación, con un total de 190 millones de euros.

–La primera gama tiene el mayor peso en el negocio, pero, ¿cómo ha sido el comportamiento del resto de productos?

"Con la COVID, los productos de primera gama experimentaron un aumento importante"

–Hasta que llegó la pandemia, la IV gama iba creciendo en volumen, mientras que la I gama se mantenía. Distinto fue el escenario con la entrada de la COVID, donde los productos de primera gama experimentaron un aumento importante a partir de marzo de 2020, incrementando el consumidor su compra en productos básicos como iceberg y romana, productos rápidos y fáciles de cocinar. Tras esto, se produjo una estabilización global en la categoría.  En relación con la IV gama, en concreto, la bolsa en sus diferentes formatos, en nuestro caso, no se ha visto afectada en volumen, aunque sí ha bajado la venta destinada al canal hostelero, que a su vez se ha visto compensada con el incremento de la venta de la bolsa pequeña en los supermercados. Por otra parte, las ensaladas preparadas, el bowl, ha sido el gran afectado por la pandemia, sobre todo desde el mes de marzo, hasta el verano. El confinamiento y la consiguiente desaparición de las comidas fuera de casa, además del cierre de la hostelería, han dado lugar al incremento de comidas preparadas en casa, lo que ha afectado a la categoría de snacking y comida preparada.

–Con el confinamiento cambió algo la forma de alimentarnos, más tiempo en casa más tiempo para cocinar, por lo que se consumieron, sobre todo productos de primera gama, ¿han vuelto los hábitos de consumo al periodo anterior a la crisis sanitaria? O si han cambiado, ¿en qué sentido lo han hecho?

–El obligado confinamiento y la nueva rutina de los ciudadanos provocó un cambio importante en los patrones de alimentación y, por tanto, de compra de los consumidores. La creciente relevancia de mantener una dieta sana y saludable para evitar problemas de salud o coger demasiado peso llevó a un incremento del consumo de frutas y verduras, tendencia que ha venido para quedarse. Este cambio en la alimentación durante el confinamiento, en el que las frutas y verduras adquieren protagonismo, y la posterior consolidación de esta tendencia, se pone también de manifiesto en el hecho de que, según los datos extraídos del I Observatorio Greenlovers de Primaflor, preguntados sobre qué producto no faltaría en la nevera si hubiese otro confinamiento, el 40% de los encuestados contestó, lechuga. El consumidor ahora cocina más en casa, se reúne en los hogares en lugar de fuera del hogar y se protege más. Está más preocupado por la salud y demanda autenticidad y transparencia en el etiquetado y en la información accesible en online sobre el producto.  Hay una tendencia al alza en el apoyo a la economía local y la preferencia por la compra de proximidad.  Es evidente que el consumidor es más sensible al precio, vigila más el gasto y la calidad. Desde Primaflor trabajamos por y para la calidad. El precio en productos frescos depende en su gran mayoría de la ley de la oferta y la demanda. Actualmente, los productos básicos son los que más demanda están teniendo, en nuestro caso lechuga iceberg y romana. Respecto a los platos preparados, es la categoría que más está sufriendo ahora, pero es una categoría con mucho futuro y desarrollo por delante para cuando volvamos a nuestros hábitos.

–¿Qué novedades nos encontramos este 2021 en el catálogo de Primaflor?

–Para este 2021 estamos trabajando una nueva gama de productos que tratan de facilitar la vida al consumidor en línea con nuestra política de empresa. Buscamos productos que acorten los tiempos de cocinado y nos hagan más fácil la vida en casa, ya que nos encontramos ante un nuevo escenario al que tenemos que adaptarnos.

–Se insiste cada vez más en la importancia de la transformación digital en las empresas. Ésta ha sido muy importante para el óptimo funcionamiento de las compañías en esta pandemia, ¿cuál es la apuesta de Primaflor en este sentido?

Cecilio Peregrín, director corporativo de Primaflor Cecilio Peregrín, director corporativo de Primaflor

Cecilio Peregrín, director corporativo de Primaflor / Diario de Almería

–Entendemos que el futuro pasa por esa transformación digital que, sin duda, debe suponer un cambio en la cultura empresarial. Un claro ejemplo es que la nueva realidad ha dado pie a oportunidades de acercamiento al consumidor a través del canal digital. No solo de cara a la comunicación sino de cara al consumo y la disponibilidad de producto multicanal.  Hace unos meses publicábamos nuestra nueva web de empresa. Está construida bajo el entorno VUCA, que es una herramienta tecnológica para adaptarse a los diferentes cambios que surjan en el seno de la compañía en relación a los clientes. Con ello, se abordan los intangibles para una correcta visión de futuro; se afronta la incertidumbre con conocimiento, formación y actualización constante; se aporta claridad, simplicidad y sencillez en la ejecución de tareas y acciones dentro de la organización, además de agilidad, para disponer de capacidad de reacción ante los imprevistos que impidan seguir con la planificación estratégica de la organización. Bajo esta premisa, la web se ha cimentado con una orientación muy definida hacia los dos pilares fundamentales para la compañía, como es el mercado de clientes y el de consumidores finales. Para el mercado de clientes, se ha creado un área privada con el objetivo de facilitar una comunicación eficaz de la mano del equipo comercial de Primaflor. Para el consumidor final, se ha pensado en un enfoque divulgativo y de aprendizaje, a través de video recetas e información de interés como hábitos saludables, consejos de alimentación e ideas para mantener una vida activa y sana.  

–Echando la vista atrás, teniendo en cuenta que el sector agroalimentario, en general, y su empresa, en particular, no cesaron su trabajo y garantizaron los alimentos, ¿cuál ha sido el momento o el acontecimiento que más incertidumbre ha generado en el contexto de la COVID19 desde el punto de vista empresarial?

–La declaración del estado de alarma y el incremento de la demanda de productos por parte de los consumidores, supuso un fenómeno desconocido para nosotros y en general para todo el sector. Encontrarnos ante una situación en la que de repente el consumidor comenzó a demandar una gran cantidad de productos básicos en supermercado fue algo inesperado, y tuvimos que reaccionar rápido para mantener las cadenas de suministro. Al igual que ocurrió esto, poco después el escenario fue totalmente contrario, donde el consumo disminuyó hasta estabilizarse y tuvimos que reajustar de nuevo las cosechas. Por otra parte, la adaptación plena a un teletrabajo obligado y el cierre perimetral en ciertas ocasiones obligó a nuestra red comercial a adaptarse a rápidamente a esta situación, dejando atrás las visitas a clientes o reuniones comerciales, que ayudaban tanto al día a día en la venta de la compañía. Con todos los procesos habituales de producción, distribución y comercialización alterados por el contexto pandémico y acaparamiento de productos, la tecnología y las soluciones cloud han permitido a este sector, declarado como esencial, continuar la actividad y responder a una demanda cambiante.

–Respecto al Brexit, ¿se ha visto afectada la exportación o comercialización de sus productos en Reino Unido?

"Hemos demostrado una vez más lo que este sector lleva siendo desde siempre: guerrero"

–Gracias al acuerdo in extremis que con éxito se pudo materializar por parte de la Comisión Europea y el Parlamento Británico, se facilita la relación comercial de intercambio de bienes y servicios entre ambas economías. El escenario anterior, que se planteaba con aranceles para las frutas y verduras españolas, nos afectaba negativamente, pues nuestros costes no son comparables a los de terceros países productores, debido a que nuestros procesos de calidad, trazabilidad y seguridad alimentaria tampoco lo son. Se pone de manifiesto, derivado del acuerdo entre ambas economías, que las partes seguimos teniendo una preferencia mutua para el intercambio de bienes y servicios y esto se evidencia en la fluidez actual a nivel logístico. Las relaciones comerciales eran, son y serán intachables con nuestros clientes británicos, pues ambas partes estamos asumiendo, con la madurez necesaria, la adaptación a las nuevas circunstancias con el objetivo de que el cliente final no sufra las consecuencias de esta decisión política.

–En un perfil suyo publicado en una entrevista de la publicación especializada Fruit Today leí que su música preferida siempre dependía de su estado de ánimo, ¿qué título musical pondría para dar melodía a la labor de toda la cadena agroalimentaria en este año?

–Por un lado pondría al Verano en G menor, de Vivaldi, por la fuerza y el dinamismo de esa melodía, que trasmite como hemos trabajado durante todo este tiempo: con una compenetración y ánimo rayando lo perfecto. En una versión más actual, utilizaría la canción This is me del musical El Gran Showman porque, en ocasiones, al sector agro se le intenta “demonizar” (posiblemente no sea la mejor palabra), se le acusa con frecuencia de muchas cosas que están totalmente alejadas de la realidad, cuando no falsas. Hemos demostrado una vez más lo que este sector lleva siendo desde siempre: guerrero.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios