Chambao llenó de público el Mesón Gitano en una noche de despedida
Lamari y sus ocho músicos ofrecieron un recorrido por su discografía
El público vivió una noche mágica con la música del grupo
Los almerienses llenaron el viernes la explanada del Mesón Gitano en el tercero de los cuatro conciertos de Alamar 2017, el festival de músicas del mundo del Almería Summer Festival programado por el Área de Cultura, Educación y Tradiciones del Ayuntamiento de Almería, hasta el punto de que se cerró el acceso por completar aforo.
En pleno tránsito por un punto de inflexión marcado por la decisión de Lamari de emprender proyecto en solitario tras 16 años al frente de la banda, Chambao hizo escala el viernes en la gira de despedida que les está llevando por las principales ciudades y festivales de todo el país.
Y lo hizo con las mismas ganas y la misma transparencia de la que ha hecho gala a lo largo de toda su trayectoria, en la que se iniciaron como precursores del denominado 'flamenco chill' y en la que poco a poco han ido perdiendo las programaciones electrónicas para ganar en matices de otras músicas y sonoridades con una numerosa formación compuesta por ocho músicos, con guitarra eléctrica, acústica, bajo, batería, teclados, percusiones, flauta travesera y trompeta. Toda una conjunción instrumental que permitió dar brillo a una música tan directa como cristalina, con la limpia y sentida voz de una vocalista reconocible en cada una de las palabras.
Habitual veraneante de Almería y provincia, Lamari no escatimó en agradecimientos, no sólo por la enorme asistencia, sino por el marco en el que se desarrolló el concierto "cuando he llegado y he visto dónde tocábamos, mirando a un lado (la Alcazaba) y mirando a otro (el mar) he alucinado, no estoy acostumbrada a estas cosas, es una maravilla de sitio, disfrutadlo", apuntó tras concluir una de las canciones más divertidas de su repertorio, el son cubano de Roé por la escalera.
Antes, sonaron Detalles y Universos Paralelos, con las que abrieron, además de un popurrí variado con éxitos de la primera época como Caminando por lacalle, Playas de Barbate, Los muchachos de mi barrio o la más reciente Sin avisar, perteneciente a su último trabajo discográfico.
Sin excesivo descanso y con ganas del público de disfrutar de buena música y de una noche de verano en la que el calor dio tregua gracias a una ligera brisa, el extenso viaje continuó Como la luz, visitando a Mi primo Juan y con un primer recuerdo a Camarón de la Isla (precisamente hoy domingo se cumplen 25 años de su fallecimiento) "y a todas las mujeres" con Rosa María.
Alegría y ganas de mover el cuerpo en todo momento fueron los denominadores comunes de una actuación que, antes de varios temas esperados por todos, aún desplegó Sueño y muero, Cómeme y Camino Libre.
En la 'traca final' antes de los bises aparecerían la más que celebrada Pokito a poco, Mejor Versión, Los Sueños y, cómo no, Papeles Mojados.
Para los bises, Lamari y los suyos se reservaron un momento más intimista, en corro, sentados y sobre cajones de percusión, interpretarían Camino Interior, Volando Voy, segundo guiño al cantaor con el tema compuesto por Kiko Veneno, cita estrella de la pasada edición de Alamar, Desconocido y Olvidarme de ti.
Con un público exhausto y acercándose a las dos horas de duración de concierto, la despedida llegaría con Imagina y con una enérgica Ahí estás tú, con una coda rockera y creciente que fue el colofón a una actuación más que notable y que culminó la satisfacción de un público que se lo pasó en grande.
No hay comentarios