LLAMADA Calle de las Lencerías en el siglo XVI. Calle emblemática de Almería, nexo de unión entre la Almería moderna y la antigua. Formada en el Siglo XI, era el antiguo camino de Pechina de la Almería Califal y Carrera Real de los Reyes Católicos.Su trazado une la calle Jovellanos con la Puerta de Purchena, aunque la parte más conocida como "Calle de las Tiendas" es el tramo entre Jovellanos y Hernán Cortés.

Era parte del camino que recorrían en el siglo XI los que venían desde Pechina o Tabernas y se dirigían a Málaga. Entraban por la carretera de Granada, calle de Granada y franqueaban la Puerta de Purchena. Desde ahí atravesaban la calle de Las Tiendas, la Plaza Vieja, calle Arraez, cruzaban la calle de La Reina (Entonces conocida como rambla de Gormaz), pasaban por debajo de un arco que daba acceso a la calle de la Almedina, luego desfilaban por la puerta de la antigua Mezquita Mayor (actual Iglesia de San Juan). Seguían por la Puerta del Socorro y las murallas de la Judería (La Chanca) Finalmente subían por el camino viejo, que aún se conserva y se accede a el desde el Barranco Greppi, y tomaban rumbo a Málaga por un camino que recorrían paralelo a la costa.

Calle comercial en la que los almerienses han hecho sus compras durante años en tiendas ya desaparecidas como almacenes La Sirena (del cual queda aún su logo pintado en la fachada), en los que muchos adquiríamos nuestros primeros discos de vinilo. El Blanco y Negro, Sombreros Plaza, etc. Alguno se resiste al cierre y siguen ahí desde hace años como es el caso de "el Valenciano"-

Fundada por D. Vicente Ivorra Román, (Nacido en 1842) de profesión buhonero. Se dedicaba a traer cerámica desde Agost (su ciudad natal) en caravanas de mulas para su transporte. Se estableció en Almería y en la calle de Las Tiendas abrió su negocio con el nombre de "El Valenciano". Sigue en el mismo lugar desde su inauguración y es probablemente el comercio más antiguo de Almería ya que aunque que la fecha de su fundación aparezca como 1870, seguramente su inauguración sea anterior. Indalos, abanicos, escudos, llaveros, muñecas, cerámica, lucen en sus antiguos muebles de madera de cajones con tiradores en forma de concha, estanterías y vitrinas. Su propietario actual es D. Andrés Ivorra Jiménez, biznieto de su fundador.

Haciendo esquina con la calle Jovellanos se encontraba el comercio "El blanco y Negro" con su llamativa fachada de rombos en esos colores. Anteriormente, en el mismo lugar, la papelería Sempere. La Papelería de Isidro García Sempere lucía en la fachada que daba a la calle del Santo Cristo (actual Jovellanos) un cartel con el nombre del propietario, y otro cartel en la fachada de la calle de Las Tiendas con el rótulo "Papelería del Ferro-Carril". De este comercio salieron muchas de las postales con fotografías de aquella Almería, ya que como imprenta también hacían de expendedores de material fotográfico. Tal era la fama de esta papelería que en ella fue expuesta la bandera de combate del submarino A3. La Bandera fue realizada a propuesta del Sr. Jover durante su gestión en el ayuntamiento, ya que el submarino carecía de una, y se costeó por suscripción popular.

Otro de los comercios "de toda la vida" era la droguería Juanjo. Ubicada durante años en la esquina con la calle Lectoral Sirvent se trasladó hace unos años la calle Azara. (Calle de las Tiendas a plaza Flores)

En la Calle de las tiendas tuvieron sus sedes varios periódicos, como Diario de Almería, La Campana de la Vela, El Demócrata, El Régimen, Almería Alegre, Almería Bufa. El edificio que hace esquina con la calle Hernán Cortés, que actualmente pertenece a la Junta de Andalucía, fue construido por Guillermo Langle para una tienda de Marín Rosa.

Recorriendo el tramo desde la iglesia de Santiago hacia puerta Purchena, a la izquierda nos encontramos otro comercio antiguo; la tienda de "Mena", y más adelante la Plaza de Vivas Pérez.

Debe su nombre al farmacéutico Juan Vivas Pérez, inventor de los Salicilatos de Bismuto y Cerio. Fomentó, creó y apoyó varias instituciones como por ejemplo el Centro Social conocido como "tienda asilo". En ella se facilitaba a precios simbólicos comida a quien lo necesitase.

En esta misma plaza estuvo la casa de los Castro, construida por el capitán Andrés de Castro a final del siglo XVII. Andrés de Castro era en el 1677 regidor perpetuo de Almería y capitán de caballos de guarnición. La casa fue derribada para acabar con una discusión surgida a raíz de su restauración. En la esquina se encontraba la tienda "La Tijera de Oro" que vendía telas para la confección de trajes, etc.

El anchurón que hay antes de llegar a la Puerta de Purchena es la plaza dedicada a Manuel Pérez García, catedrático de Agricultura que fue director del diario "La Justicia" en Madrid y el "Popular" en Almería.

Hace poco ha sido ampliada y reformada. Una reforma no exenta de polémica surgida a raíz de los restos encontrados y que se han enterrado bajo losas y césped artificial, ya que al parecer carecían del interés suficiente para su puesta en valor y recuperación. A pesar de las críticas y de las voces que nos alzamos en contra, ganó esa costumbre urbanística tan arraigada en nuestra ciudad de enterrar todo el patrimonio histórico. Ahora parece que alguien se ha dado cuenta de que si tiene valor y se plantean recuperarlo para hacerlo visible a través de suelo de cristal o similar. Son esas "Cosicas de Almería" que desgraciadamente ocurren tan a menudo. En la misma plaza se encuentra la actual entrada a los refugios. Otra construcción absurda, no por su función, pero si por su fealdad y volumen inadecuado y por el impacto visual negativo que supone para todo el entorno.

Al final de la calle de Las Tiendas, en su unión con la Puerta de Purchena y el paseo, el archiconocido "Kiosco Amalia", fundado el 1 de Enero de 1889.

Conocido por su célebre "Americano". Una bebida que, según cuentan, su origen y nombre es debido a que un día la pidió uno de aquellos actores americanos que grababan películas en los 70 en Almería, y que se hospedaba cerca. La bebida se sirve en un vaso tipo "chato", y sus ingredientes son: Leche muy caliente, un trozo de piel de limón, una cucharadita de azúcar, y lo que le da su sello, licor de nuez de cola y un poco de canela. Aunque el "Americano" es su bebida estrella, también es conocido por un granizado de limón con licor de menta llamado "Jabea", y por el "quemaillo" que consiste en echar en una tacita unos granos de café, un trozo de cáscara de limón y azúcar. Todo esto se cubre con coñac caliente, y se prende, agitándolo para que se vaya quemando el alcohol. Para beberlo hay que volcarlo en otro vaso, y quitar los granos de café y el trozo de limón.

La calle de las Tiendas es un eje principal del que salen y llegan pequeñas y estrechas calles que la comunican con la Plaza Marín, la Plaza Flores, La Calle real, y otras. Calle que un día fue de comercio tradicional, tan complicados de mantener hoy día por la competencia de los grandes centros comerciales.

Invade una sensación de tristeza pasear por ella y ver como muchas de estas tiendas han sido sustituidas por bares, o por algo mucho peor, los llamados "gastro-bares"